Comentario:
El cuerpo no puede sobrevivir sin hacer cosas día a día a menos que tu no te
identifiques con el. Sin embargo, nuestra experiencia aquí es de ser un cuerpo
y por lo tanto, mientras nuestra identificación sea con el mismo, se van a
hacer cosas. Así que por motivación no tienes que preocuparte. Ahora, la
cuestión aquí es si la razón por tu "motivación" es miedo o paz.
Acciones motivadas por el miedo te identifican mas con la
forma, mientras que acciones motivadas por la paz te ayudan a moverte mas
serenamente por el mundo de las formas mientras que al mismo tiempo te ayudan a
desidentificarte con la forma gradualmente hasta que la misma se deja a un lado.
Esto me recuerda la lección 155 del curso que nos dice,
"Hay una manera de vivir en el mundo
que no es del mundo, aunque parezca serlo. No cambias de apariencia, aunque sí
sonríes mucho más a menudo. Tu frente se mantiene serena; tus ojos están
tranquilos. Y aquellos que caminan por el mundo con la misma actitud que tú
reconocen en ti a alguien semejante a ellos. No obstante, los que aún no han
percibido el camino también te reconocerán y creerán que eres como ellos, tal
como una vez lo fuiste." W-pI.155.1:1-5
La inercia por lo general puede ser miedo, y/o también
confusión, sobre todo cuando estamos pasando por el proceso del deshacimiento
del ego, pues nos encontramos como estancados entre dos mundo. Eso me recuerda
cuando Cristo nos dice en el Curso, "Este
alternar entre los dos niveles de percepción se experimenta normalmente como un
conflicto que puede llegar a ser muy agudo." T-2.III.3:9
Yo me he dado cuenta que siempre y cuando ponga mi atención
en el interior, el cuerpo va a hacer cosas en el mundo. Lo que no hago es hacer
que las mismas sean importantes. Y no son importantes porque reconozco que lo
mas importante en mi vida es la paz interna. Sin embargo, paradójicamente, como
te podrás dar cuenta, estoy muy ocupado, y haciendo muchas cosas. Como ahora
mismo contestando esta nota, que no tiene importancia, jejeje, en un avión de
camino a Los Ángeles.
Mas tengo una agenda bastante llena, con dos nuevos libros
en publicación traducidos al Español, estos son duales, pero muy buenos,
titulados, La Montaña Misteriosa
y El Vendedor del Nuevo Milenio.
Pero con relación al Curso, y charlas en general, mañana tengo una charla en
una cárcel, el próximo día para un centro de rehabilitación las cuales
surgieron de un ministro y una sicóloga que me escucharon dar una charla en un
centro espiritual en Huntington Beach, CA, luego en 5 días salgo para Canadá,
luego México, luego Panamá (conferencia dual para empresas), Venezuela, Costa
Rica, España, mas otros países que estamos viendo que sucede, etc.
Y esto no tiene nada que ver con "motivación." Yo
solo estoy observando mi vida desenvolverse muy naturalmente, y una vez mas,
sin apegarme a nada de lo que esta sucediendo sin darle valor ni haciendolo
importante, ya que ni tiene valor, ni es importante. Pero eso no significa que
no pueda disfrutar la experiencia.
Cuando tu meta es la paz de Dios, confía en que harás lo que
tengas que hacer, y al no tomarte el mundo en serio, puedes hasta moverte en la
dirección de tus deseos, solo que al no tener apego sicológico a ellos te los
puedes disfrutar mas de lleno.
Pongamoslo de esta manera. El mundo te enseña que tienes que
tener metas pues las mismas son tu razón de vida (motivación), y que tienes que
valorizar tus deseos, los cuales podrían ser tener una pareja, ganar mas
dinero, tener éxito en negocios, un cuerpo mas esbelto, lo que sea, que es otra
manera de decir, tu mundo es lo primario, y Dios es secundario, pues de lo
contrario, buscaríamos a Dios primero, y el resto seria secundario.
Sin embargo, esos se convierten en tus nuevos dioses, pues
los persigues, los alabas, los desear. Entonces cuando terminas adquiriendolos,
y te los disfrutas por un rato, si es que de verdad te los puedes disfrutar,
una nueva cantidad de miedos surgen. Uno de ellos siendo el miedo de perderlos
por lo que tanto has luchado.
Pues ahora te la pasas preocupada,
"protegiendolos", y no solo eso, ya que nada de lo que tengas en este
mundo te puede hacer feliz, después de haber manifestado esos deseos, ahora
necesitas alcanzar nuevas metas, y continuas el circulo vicioso por el resto de
tu vida debido a que has sustituido el amor de Dios como tu sustento por tus
ilusiones.
Eso me recuerda la lección 50 que nos dice: "He aquí la respuesta a cualquier problema que se te
presente, hoy, mañana o a lo largo del tiempo. Crees que lo que te sustenta en
este mundo es todo menos Dios. Has depositado tu fe en los símbolos más
triviales y absurdos: en píldoras, dinero, ropa "protectora",
influencia, prestigio, caer bien, estar "bien" relacionado y en una
lista interminable de cosas huecas y sin fundamento a las que dotas de poderes
mágicos. Todas esas cosas son tus sustitutos del Amor de Dios. Todas esas cosas
se atesoran para asegurar la identificación con el cuerpo. Son himnos de
alabanza al ego. No deposites tu fe en lo que no tiene valor. No te sustentará."
W-pI.50.1:1-3;2:1-5
Pues mi sugerencia es, olvida tu preocupación por la
inercia, y enfoca en entregar tu voluntad al Espíritu Santo, confiando en que
toda decisión tomada con El es la mas apropiada, y te vas a sorprender con lo
que termines haciendo, que pueda que sea algo completamente opuesto a lo que
creías que querías. Y es ahí donde entenderás porque Cristo nos recuerda a
través del curso, "Tu única función aquí es decidir en contra de decidir
qué es lo que quieres, reconociendo que no lo sabes." T-14.IV.5:2 Y la razón por que no lo sabes, es porque lo único
que de verdad quieres es despertar de este sueño y no tus ilusiones.