Recientemente
tuve una relación de pareja, que aunque fue muy corta, me brindó la
oportunidad de sacar a la superficie lo que había escondido en lo más
profundo del inconsciente.
Antes de elaborar un poco me gustaría
hacer hincapié que la razón por la cual el trabajo del perdón puede ser
muy doloroso es porque nos lleva no solo a mirar los obstáculos al amor
sino que mas bien a atravesarlos. “Trataremos
ahora nuevamente de llegar a la luz en ti, que es donde realmente se
encuentra tu salvación. No puedes encontrarla en las nubes que rodean la
luz, y es ahí donde la has estado buscando. No está ahí. Está más allá
de las nubes, en la luz que se encuentra tras ellas. Recuerda que tienes
que atravesar las nubes antes de poder llegar a la luz.” W-pI.70.8:1-5
Y para atravesarlos hay que sentirlos.
Este no es un trabajo que emplea lógica sino que mas bien aceptación.
Y si tenemos miedo a sentir no podremos permitir que los obstáculos
(culpa inconsciente) salgan a la superficie para ser primero vistos y
sanados ya que al no permitirnos sentirlos simplemente los suprimiremos
para así proyectarlos a nuestras circunstancias, a nuestras parejas, a
nuestros trabajos, en fin, para justifica la proyección de un “mundo”.
No
siempre, pero la metafísica y espiritualidad contemporánea, la nueva
era y todo ese trabajo “espiritual”, inclusive, en muchos casos hasta la
misma sicología y sicoterapia tienen como propósito no sentir sino que
mas bien buscar la manera de encontrar “creencias” y intercambiarlas por
otras mas “positivas”, mas “placenteras” debido a que su enfoque no es
deshacer el personaje con el que nos hemos identificado sino que mas
bien hacerle sentirse “mejor.”
Sin embargo el propósito del
sentir en este caso es reconocer que nos brinda la oportunidad de ver
donde todavía hay culpa inconsciente (miedo a Dios, miedo al Amor) para
que pueda haber una corrección a nivel mental y poder tener acceso a lo
que de verdad queremos, paz interior (recordar lo que somos).
Mientras
sigamos creyendo que esa paz o esa felicidad se encuentre en el
“mundo”, vamos a continuar perpetuando la creencia inconsciente que dice
que somos seres separados, en un mundo separado, carentes de amor, y
por lo tanto tenemos que buscar ese amor, esa paz, esa abundancia que
“supuestamente” nos falta “fuera”.
Aunque lógicamente podamos
saber esto, aunque podamos tener la teoría clara, a nivel emocional
cuando surgen todas esas sensaciones, a raíz de ese sentir tan profundo
podríamos sentirnos completamente abrumados y caer en las garras de la
culpa ya que el sentir es la herramienta MÁS PODEROSA que el ego tiene
para mantener vigente en la mente la creencia de que somos cuerpo y no
Mente.
Debido a que las emociones son las que mueven al personaje
que no está consciente del juego, el placer que es lo que nos atrae a
perseguir algo mientras que el dolor que es lo que nos hace rechazarlo
seguirá aparentar estar rigiendo nuestra vida.
Voviendo a mi
experiencia con la relación, como en todo caso, me sentí atraído a ella
en base a ciertos atributos, no obstante, lo que motiva esa atracción es
siempre lo mismo, la carencia interna que dice que ahi voy a encontrar
lo que me falta.
Eso no significa que me voy a privar de la
oportunidad de conocer a alguien pues las relaciones intimas nos brindan
una oportunidad impresionante para sanar ya que en ellas es donde se
conecta con el sentir mas profundo. Y estoy hablando de la intimidad, no
de la relación.
Personas que tienen miedo a sentir esconden sus
sentimientos aun cuando estén en una relación. O mejor, no se envuelven
en una relación. Por eso es que la gran mayoría de las relaciones están
basadas mas bien en convivencia que en intimidad. ¿Pues quien querría
pasar por el doloroso proceso de sentir la oscuridad tan profunda que se
mantiene oculta en el inconsciente?
Sin embargo hay que
atravesarla para llegar al verdadero Amor que reside ahi. Y no es
cuestión de que si se va a atravesar, sino mas bien, cuando se va a
atravesar. Por algo se nos recuerda: “Tener libre albedrío no quiere
decir que tú mismo puedas establecer el plan de estudios. Significa
únicamente que puedes elegir lo que quieres aprender en cualquier
momento dado.“ T-In.1:4-5
O como también se nos recuerda: "La
resistencia al dolor puede ser grande, pero no es ilimitada. A la
larga, todo el mundo empieza a reconocer, por muy vagamente que sea, que
tiene que haber un camino mejor." T-2.III.3:5-6 Otra sería; "Si
quieres ser como yo, te ayudaré, pues sé que somos iguales. Si quieres
ser diferente, aguardaré hasta que cambies de parecer." T-8.IV.6:3-4
Sí,
cuando emprendemos en un camino "espiritual" o de auto ayuda, todos
decimos que queremos la Verdad, decimos que queremos el amor, decimos
que queremos la luz, decimos que queremos la paz, decimos que queremos
“sanar” pero no queremos mirar los obstáculos que hemos interpuesto que
no nos permiten experimentar ese verdadero amor, esa luz, esa paz, esa
sanación.
Pues cuando ella y yo comenzamos a conocernos empezaron
a salir sentimientos que aunque sé que lo que tenía que hacer era
sentirlos, y sí, fui muy honesto con ella diciéndole lo que estaba
sintiendo, al mismo tiempo sentí una incomodidad muy grande porque
sentía culpa cada vez que hablábamos ya que quería sentirme bien con
ella y no contarle constantemente lo mal que me estaba sintiendo.
Mientras
sentía observé como el ego estaba buscando la manera que justificar mi
sentir convenciéndome de que habían algunas cosas sobre ella que me
hacían sentir de esa manera, en otras palabras, buscando donde proyectar
mi culpa para justificarla.
Pero aun así reconociendo que no tenía nada que ver con ella ya que estaba consciente de que, “nunca estoy disgustado (o sintiendo lo que esté sintiendo) por la razón que creo” W-pI.5, “no soy víctima del mundo que veo” W-pI.35 “he inventado el mundo que veo” W-pI.34 y así sucesivamente, aun así caía de vez en cuando en mi propia trampa de enjuiciar y justificar.
Por
eso es que este es un trabajo continuo, no de leer las lecciones y ya, o
de leer el curso y ya. Este es un proceso de constante auto observación
hasta que la mente haya experimentado un grado de sanacion que no
requiera ya tanta atención.
Reconociendo que el sentir a ese
nivel para mi estuvo lleno de mucha confusion, la Vida siempre reconoce
que cuando uno está abierto a atravesar esas nubes, nunca estamos solos y
la Vida misma nos apoyará con los recursos que sean necesarios para
continuar deshaciendo los obstáculos al amor.
Esa relación con
ella me brindó un regalo, y ese regalo, una vez mas, fue el poder
sentir. No significa que ya lo que estuvo ahi se halla sanado, o quizás
si. Lo que sí me gustaría aclarar es que cada vez que nos brindamos la
oportunidad de sentir conscientemente, y la palabra clave es
CONSCIENTEMENTE, siempre algo se sana.
Si de lo contrario
ignoramos el sentir, si lo suprimimos, si lo justificamos, si culpamos,
etc., ese patron continuará una y otra vez con todas nuestras relaciones
hasta que traigamos consciencia a ello.
En mi proceso siento que
esa es un area que ahora estoy preparado a mirar y sanar con el
Espíritu Santo. Por eso fue que la oportunidad para esa relación se dio.
Y reconocer que lo que sucedió conmigo fue un sentir que se activó
desde lo mas profundo de mi mente que solo pedía ser abrazado, ser
aceptado, y permitir que se quede conmigo EL TIEMPO QUE FUESE NECESARIO
para que el Amor pueda entonces hacer Su trabajo con él.
Solo que
como fue tan fuerte lo que estaba sintiendo, también la culpa surgía
diciendo que al no querer herirla sientiéndome de esa manera, lo mejor
seria alejarme de ella o cualquier mecanismo que el ego siempre utiliza,
“quizás ella no es la persona para mi” o “no me gusta esto o lo otro” y
así sucesivamente.
Eso no significa que uno se tiene que quedar
en una relación donde salen todos esos sentimientos, o quizás donde
honestamente no haya mucha compatibilidad. De todos modos la decision de
que si la relación durará o no la Vida misma lo decidirá. Pero una vez
más, hay que estar consciente de que esos sentimientos, no son para ser
analizados sino que para permitir ser sentidos de manera que puedan ser
sanados.
Por eso no tengo que preocuparme por quien estará o no
en mi vida. Lo único que puedo hacer es de nuevo, observar cada
experiencia y reconocer el regalo que se me brinda a raíz del sentir
para perdonar, para poder sanar. Y no estoy hablando de sanar el
personaje, sino que sanar la creencia en la mente que dice que soy un
personaje separado de la Verdad.
En fin, mi corazón no está
cerrado a una relación de pareja, pero sí me llevé el regalo de sentir
mas profundamente, y en una próxima experiencia aprender a darme más
tiempo para abrazar ese sentir. La intimidad es lo que nos conecta con
ese sentir profundo, y aunque soltero se puede avanzar en ese trabajo,
las relaciones son las que más nos apoyan en sacar lo que está escondido
en lo más profundo del inconsciente.
Agradecido soy por haberla
conocido, por el tiempo que compartimos, y nunca podré decir si ella
estará de nuevo en mi vida o no, solo puedo recordar que este momento es
el único momento que hay, y confió en el proceso de la Vida tal y como
se vaya desenvolviendo, pues no importa lo que suceda, "Todas las cosas obran conjuntamente para el bien. En esto no hay excepciones, salvo a juicio del ego.” T-4.V.1:1-2