Comentario:
Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que toda experiencia es un deseo
interno de querer que esa experiencia fuese así para poder entonces justificar
nuestra posición como víctimas.
Es como un productor que escribe un guión, luego se va al
cine a ver su propia película,
y se encuentra culpando a los actores por lo que están haciendo, sin darse
cuenta que lo único que ellos hacen es ejecutar el guión tal y como el se les pidió.
El ego busca culpar para justificar su posición como
inocente víctima, mientras que el Espíritu Santo nos recuerda que; “El secreto de la salvación no es sino este: que eres
tu el que se esta haciendo todo esto as si mismo...”
T-27.VIII.10:1, no para que nos sintamos culpables por lo que nos esta
“aparentemente” sucediendo, sino que para que podamos liberarnos de la culpa que dio lugar a lo
que sentimos.
Pues recuerda, el juicio del que Un curso de milagros habla,
no tiene nada que ver con lo que creemos ver o sentir, sino que con el
significado (interpretación) que le damos a lo que “vemos” o “sentimos.” Pongo
esas palabras entre comillas pues un cuerpo que no existe no puede ni ver ni
sentir, pero al nivel de consciencia en el que nos encontramos, esas son las
oportunidades que nos damos para sanar.
Pues a través de lo que “sentimos” podemos tomar una nueva
decisión, no la de culpar, que es la que el ego nos exhorta a que tomemos, sino
que la de perdonar, de forma que una vez la culpa (interpretación) es
erradicada de la mente, lo que queda por debajo es paz interna.
Así que volviendo a tu pregunta, dale gracias de todo corazón a esa “persona”
(proyección tuya) por brindarte la oportunidad de sanar algún obstáculo que esa
experiencia trae a la superficie de manera que puedas liberarte, pues por eso
fue que invitaste al Espíritu Santo en tu vida, para mirar con El los
obstáculos que tu has interpuesto para no poder experimentar tu paz interna.
Estas lineas del Curso, aunque no son muy “inspiradoras” si
las entiendes, y las aplicas, especialmente en todas tus experiencias, vas a avanzar inmensamente. “Si algo te puede herir, lo que estas viendo es una
representación de tus
deseos secretos. Eso es
todo. Y lo que ves en cualquier clase de sufrimiento que padezcas es tu propio deseo oculto de matar.”
T-31.V.15:8-10
En otras palabras, todo lo que vemos en el “mundo” externo,
es nada mas y nada menos que nuestros “...pecados
secretos y odios ocultos...” T-31.VIII.9:2 proyectados afuera. Y
ahora buscamos la manera de justificar nuestra posicion de victma a través de
nuestras experiencias, por lo que el curso nos recuerda, “No soy víctima del mundo que veo.”
W-pI.31.
Sin embargo, el Espíritu Santo utiliza nuestras
proyecciones, si se lo permitimos, para sanar y liberarnos, que es por eso que
el extracto completo de lo que compartí nos recuerda, "¡Alegrémonos de poder caminar por el mundo y de tener
tantas oportunidades (infidelidades, mentiras, asesinos, traidores,
ataques psicológicos y físicos, corrupción a nivel social, educacional,
gubernamental, relaciones disfuncionales, injusticias, etc.) de percibir nuevas situaciones donde el regalo de
Dios se puede reconocer otra vez como nuestro! Y de esta manera, todo vestigio
del infierno, así como los pecados secretos y odios ocultos, desaparecerán.”
T-31.VIII.9:1-2
Pues ¿quieres una contestación a tu pregunta de manera que
continúes perpetuando en tu mente la creencia de que el problema esta afuera a
través de culpando y justificando, o quieres sanar? Si quieres sanar, puedes
empezar por aquí, "Cuando de alguna
manera tu paz se vea amenazada o perturbada, afirma lo siguiente: No conozco el significado de nada, incluido esto. No sé, por lo tanto, cómo responder a ello. No me
valdré de lo que he aprendido en el pasado para que me sirva de guía ahora."
T-14.XI.6:6-9