Comentario: El problema no tiene nada que ver
con lo que me estas explicando sino que tu identificaron es con el mundo de las
formas y no puedes retornar tu mente a su paz ya que todo el enfoque es en lo
que crees que tiene que suceder en tu mundo para que puedas experimentar paz.
No
estoy insinuando ni pretendiendo que no debas sentir la incomodidad que se
siente cuando no aparentan haber recursos. Sin embargo, debido a que “Todo obra conjuntamente para el
bien. Y para esto no hay excepciones salvo a juicio del ego.” T-4.V.1:1-2, toda experiencia, sobre todo la que
tu estas experimentando te da otra oportunidad para que elijas la Verdad en vez
de tus ilusiones.
En
otra palabras para que ahora mas que nada reconozcas que lo único que te brinda
paz son esos momentos donde tu enfoque es en el interior y no en tus
circunstancias, lo cual paradójicamente, dentro de un espacio mas aquietado
eres mas apta para recibir el tipo de inspiración que pudiese encaminarte hacia
lo que podría aliviar algún aparente problema en el mundo de las formas. No a
“solucionar” pues aquí no hay
soluciones, sino que a aliviar el miedo lo cual puede llegar en forma de una aparente solución de manera que
continúes poniendo tu enfoque en tu interior.
La
canción de la oración nos recuerda, “Se te ha dicho que pidas al Espíritu
Santo la respuesta a cualquier problema concreto, y que recibirás una respuesta
concreta si ésa es tu necesidad. Se te ha dicho también que sólo hay un
problema y sólo una respuesta. En la oración esto no es contradictorio. Hay que
tomar decisiones aquí y deben ser tomadas sean ilusiones o no. No se te puede
pedir que aceptes respuestas que están más allá del nivel de necesidad que
puedes reconocer. Por lo tanto, no es la forma de la pregunta lo que importa,
tampoco cómo es preguntada. La forma de la respuesta, si es de Dios, satisfará
tu necesidad tal como tú la ves. Ésto es sólo un eco de la respuesta de Su Voz.
El sonido real es siempre una canción de gratitud y amor.” C-1.I.2:1-9
Todas
nuestras circunstancias, sobre todo las que aparenta ser dolorosas son
oportunidades que nos estamos brindando para retornar nuestra atención hacia el
interior mientras que el ego utiliza todas nuestras experiencias para que
mantengamos nuestra atención afuera, y eso solo perpetua en nuestra menta la
creencia de que estamos solos y desamparados en un mundo ajeno al de nuestro
Padre, donde lo tenemos todo y no nos hace falta nada.
Cuando
le pides a Dios que te resuelva un aparente problema, como nos recuerda la
canción de la oración, “Pedir lo concreto es como contemplar el pecado y
luego perdonarlo.”
C-1.I.4:2
Es
por eso que el párrafo completo nos dice, “El secreto de la verdadera
oración es olvidar las cosas que crees que necesitas. Pedir lo concreto es como
contemplar el pecado y luego perdonarlo. También del mismo modo, en la oración
miras por encima de tus necesidades concretas tal como las ves, y las pones en
Manos de Dios. Allí ellas se convierten en tus regalos a Él, pues ellas Le
dicen que no quieres anteponer otros dioses a Él, ni tener otro amor que el Suyo.” C-1.I.4:1-4
En
muchas circunstancias, cuando las cosas no van como creemos o quisiésemos que
fueran, y le pedimos a Dios una y otra vez que nos ayude a resolver nuestro
“problema”, recordemos que si ese problema se “resolviese”, no nos sentiríamos
inclinados a mantener nuestra atención en el interior, si acaso ese seria
todavía una distracción mas lo cual nos desviaría mas del camino hacia uno mas
doloroso, y eso es lo que Cristo esta tratando de ayudarte a reconocer, que el
camino que tu elegiste es el doloroso, y Cristo quiere enseñarte el camino de
paz, amor si tu estas dispuesta a seguir sus enseñanzas y a no permitir que tus
distracciones desvíen tu mente de Su directriz.
Permiteme
compartir lo siguiente. Hace muchos años un ministro en los Estados Unidos
compartió con la congregación que había una persona que visitaba la iglesia
diariamente pidiendole a Dios que le resolviera su problema financiero.
Entonces un día ella juega la lotería y se paga con el premio mayor. OJO! No
estoy diciendo que Dios le halla concedido nada, sino que eso fue lo que
sucedió en su vida. Desde ese momento ella dejo de ir a la iglesia. En otras
palabras, observa como esa nueva distracción la saco de su enfoque en Dios y la
llevo una vez mas al mundo de las formas.
Hice
hincapié en que no cometamos el error de utilizar ese ejemplo para asumir que
Dios le respondió su petición, pues recuerda que el ego también esta buscando
la manera de llamar nuestra atención, y esa pudo haber sido otra forma de que
nuestra atención este afuera y no adentro.
¿Eso
significa que esa persona no va a regresar su atención a Dios? Todo depende de
o cuan dolorosa sea su experiencia, o como el curso nos recuerda, "La resistencia al dolor puede ser
grande, pero no es ilimitada. A la larga, todo el mundo empieza a reconocer,
por muy vagamente que sea, que tiene que haber un camino mejor." T-2.III.3:5-6, o si quizás a través
de alguna madurez espiritual se encuentra una vez mas retornando su atención en
el interior. O quien sabe si quizás ella todavía practica su relación con Dios
solo que no se siente inclinada a ir a una iglesia. Quizás no sea en este ciclo
de experiencia ilusoria donde estará preparada para entregarse a Dios de lleno.
Pero no estoy interesado en especular, sino que el momento llegará donde vamos
a tener que soltar, pues como Cristo nos recuerda en el curso, “Si quieres ser como yo, te
ayudaré, pues sé que somos iguales. Si quieres ser diferente, aguardaré
hasta que cambies de parecer.” T-8.IV.6:3-4
Entiendo
lo dificultoso que es tratar de soltar cuando hay un apego sicológico tan
grande a esta experiencia, sin embargo, observa las alternativas, que es ese
sufrimiento que tienes. Ese es el
contraste que Cristo utiliza para hacerte saber que no hay sino que UNA sola
solución, y es poner tu atención en él, pues como nos recuerda Cristo en el
curso, “Yo puedo enseñarte, pero tú tienes que elegir mis enseñanzas.” T-8.IV.6:5
Sin
embargo, es imposible elegir sus enseñanzas si tu constantemente le sigues
dando tu atención a tus problemas y no practicas diariamente retornar tu mente
hacia el interior.
Recuerda,
la Voz del padre se escucha en la mente aquietada no en la mente perturbada “El recuerdo de Dios aflora en la mente que
esta serena.”
T-23.I.1:1 Y como todo, de la misma manera que practicamos diariamente mantener
la mente perturbada, que es la razón por la que estamos constantemente en el
sufrimiento, si queremos experimentar mas paz, tenemos también que de corazón
tomarnos el tiempo de practicar elegir ese estado menta.
Es
por eso que el curso nos recuerda, “Deseo la paz de Dios: Decir estas
palabras no es nada. Pero decirlas de corazón lo es todo. Si pudieras decirlas de corazón,
aunque sólo fuera por un instante, jamás volverías a sentir pesar alguno, en
ningún lugar o momento.” W-pI.185.1:1-3
Ahora
es donde te estas dando la oportunidad de reconocer que tus ilusiones no pueden
brindarte nada, y que solo tu paz te puede liberar de esa prisión mental en la
que te encuentras, que como vez es una prisión mental, no un problema
financiero.
Si
quieres de verdad rezar, en vez de pedirle a Dios a que resuelva tus
“problemas,” pidele mejor a que te ayuda a percibirlos de otra manera. A que te
ayude a reconocer la falta de valor que tienen tus experiencia de manera que
puedas soltar y abrir tu mente a lo que de Verdad tiene valor, tu relación con
Dios.
La
canción de la oración nos recuerda, “La oración es un hacerse a un lado,
un abandonar,
un tiempo sosegado de escuchar y amar. No debería confundirse con súplicas de
ninguna clase, porque es un modo de recordar tu santidad. ¿Por qué debería
suplicar la santidad, teniendo total derecho a todo lo que el amor ofrece? 4Y
es al Amor al que acudes en la oración. La oración es una ofrenda, una renuncia
a ti mismo para ser uno con el Amor. No hay nada que pedir porque no queda nada
que desees. Esa nada se convierte en el altar a Dios. 8Y desaparece en Él.” C-1.I.5:1-5
Tranquila.
Se paciente contigo misma, y siempre recuerda que estas en buenas manos. El
Espíritu Santo sabe lo que hace,
lo que se requiere de ti ahora es tu confianza en Él y no en tus ilusiones. En
otras palabras, deja de poner tu atención en las ilusiones (añadiduras) y pon
tu enfoque en tu interior, tu relación con Dios, en otras palabras, en el
Reino, y entonces entenderás la famosa oración, “Busca primero el Reino de
los Cielos y Su justicia, y todo lo demás se te dará por añadidura.”