Te envío un saludo, normalmente se
cual es el camino que debo de tomar cuando son aspectos propios, en este caso
soy el representante de mis hermanos y de sus hijos que son 7 hermanos mas
todos sus hijos,,,,declino o peleo en forma legal.,,,gracias,,,salvador abarca."
Comentario: Toda disputa legal, que seria lo mismo que decir, todo
aparente conflicto se resuelve de la misma manera, desde la paz y no desde el
juicio.
En otras palabras, Un curso de
milagros nunca te dice como resolver
nada en el mundo pues aquí no hay nada que resolver, sin embargo, recordandote
que todo juicio a un hermano es un juicio en contra de uno mismo, “Quien
transmitiría mensajes de odio y de ataque si entendiese que se los esta
enviando a si mismo.,” T-14.IV.B.i.14:11
de la misma manera que nos recuerda que “El secreto de la salvación no es
sino este: que eres tu el que se esta haciendo todo a si mismo.,” T-27.VIII.10:1 de la misma manera que nos recuerda que
todo lo que experimentamos es una proyección, “Así es como surgieron todas
las ilusiones. El que las teje no se da cuenta de que es él mismo quien las
urde ni cree que la realidad de éstas dependa de él. Cualquiera que sea su causa,
es algo completamente ajeno a él, y su mente no tiene nada que ver con lo que
él percibe. No puede dudar de la realidad de sus sueños porque no se da cuenta
del papel que él mismo juega en su fabricación y en hacer que parezcan reales.” T-27.VII.7:7-9, el Curso simplemente hace referencia de
que si queremos experimentar paz interna no podemos ni juzgar, ni atacar, ni
culpar, ni justificar pues todo es un ataque a uno mismo ya que es nuestro
sueño y no el de mas nadie.
Esa es nuestra realidad, sin embargo,
esa no es nuestra experiencia, y por lo
tanto, como nuestra experiencia es que somos un cuerpo separado de otros
cuerpos en un mundo dual separado de Dios, tenemos que de alguna manera
funcionar aquí, mientras el Espíritu Santo poco a poco, si se lo permitimos, corrige el error en la mente para que podamos regresar a
la experiencia de nuestro estado natural, el cual es la Unidad con todo, en
otras palabras, el Amor Verdadero.
Pues retornando a tu pregunta, si
alguien comete un acto que fuese considerado como injusto o errado, nosotros no
juzgamos a nuestro hermano como un pecador ni tratamos de justificar su
comportamiento. Sencillamente reconocemos que dentro de la estructura en la que
vivimos, miramos a los hechos, sin juicio y sin carga sicológica, tomamos la
decisión que sea mas apropiada desde la paz de Dios, la cual en algunos casos
podría ser llevar a un hermano ante la justicia.
Hablando en términos completamente
dualistas, ¿como un hermano podría también aprender que esas cosas no son
aceptadas y que puede afectar a otros a menos que esté en una posición desde la
que puede experimentar las consecuencias de su decisión?
Una vez mas, eso no significa que
lo culpamos ni lo hacemos sentir mal por lo que hizo, pero si le da una
oportunidad para reconocer que su acto no fue un acto de amor sino que de
miedo.
De ahí en adelante, mientras
hacemos lo que sintamos es lo mas apropiado en ese momento, desde la paz de
Dios, el Espíritu Santo se encarga de la sanación para los dos, el aparente
“ladrón” y la aparente “víctima.” (que somos lo mismo).
Pero lo importante aquí no es que
lo que tu “deberías” hacer, mas bien como tu te estas sintiendo, pues es ahí
donde radica la culpa interna. Si te sientes afectado emocionalmente, le pides
al Espíritu Santo que te ayuda a ver esto de otra manera. “Por encima de
todo quiero ver las cosas de otra manera.”
W-pI.28
Y una vez mas, cuando la mente
esta en un espacio de menos o no juicio, estas en una mejor posición de tomar
la decisión que sea la mas apropiada para los dos, la cual podría ser llevarlo
a la justicia, o podría ser tener una conversación personal con el, o podría
ser dejar eso a un lado, y tu continuar con tu camino, confiando como siempre
que “Todas las cosas obran conjuntamente para el bien. En esto no ha excepciones, salvo a
juicio del ego.” T-4.V.1:1-2