Que Significa Todo Es Un Espejo Y Porque Es Que Las Personas Atacan?

Pregunta: "Hola, Nick, me llamo Ibis soy cubana y te hablo desde España que es donde resido desde hace 20 años, voy a ir directamente al grano por tu tiempo y por mi necesidad de saber que no se nada jajajaja... concretamente me gustaría que compartieras conmigo tu experiencia acerca de la idea de que "todo es un espejo" ya lo estuve viendo en la charla de guatemala pero me dio la sensación que no estaba completa la retransmisión del vídeo y también la idea acerca de "porque es que las personas atacan", si sabemos que no hay nadie afuera (aun así nos sentimos atacados) Gracias de antemano x tu atención y que DIOS y el ESPÍRITU SANTO te sigan guiando en tan bonito camino del cual compartes tus experiencias y q CRISTO te siga dando sus inspiraciones un fuerte abrazo."

Comentario: Empecemos por aquí. No es que todo es un espejo como si hubiese algo alla afuera sino que mas bien, como solo hay una Mente que se cree estar dividida, el “yo” que se cree estar aquí se experimenta a si mismo como un fragmento al igual que todo lo que "vemos" en el mundo como fragmentos de la Mente que me proyecta a mi.

En otras palabras, si tu estas durmiendo en España, y en tu sueño crees estar en una reunión familiar en Cuba, aunque estas viendote a ti separada de todos tus familiares, inclusive tu te crees estar separada de ti misma ya que jurarías que estas en Cuba cuando en realidad estas en España durmiendo, en si todos, al igual que tu, son un reflejo de la Mente que los esta soñando.

Es mas bien eso, que todos somos figuras de la misma Mente que nos esta soñando, y por lo tanto, todos somos uno. Si todos somos uno, pues todo lo que tienes que estar viendo es parte de ti. Ahora, de la manera que el ego se disfraza, es a través de la ilusión de creer ser un cuerpo separado de otros cuerpos. Es ahí donde "justificas" la creencia de estar separada de Dios. Y por ende, al creer estar "separada" de Dios, experimentas la dualidad.

Solo en la dualidad se experimentan opuestos; personas que te "quieren" y personas que te "atacan." Pero en si, las dos son distracciones que tienen un solo propósito. El de justificar tu posición como un ego separado de otros egos. Los que te quieren son las proyecciones que te mantienen experimentando un temporal placer con el propósito de creer que esta es tu experiencia. Sin embargo los que te atacan, aunque la experiencia sea dolorosa, sirve el mismo propósito, de creer que esta es tu experiencia.

Y el problema no es los que te atacan ni los que te quieren, sino que la Mente que se cree estar dividida los proyecta de esa manera de forma que la atención este siempre enfocada en las ilusiones, ya que tiene miedo de mirar hacia adentro, donde se dará cuenta de que no hay nada que temer y por ende, desaparecer en la nada de manera que pueda despertar de esta experiencia fiscal dual, que en sí no existe.

Aquí lo importante no es el porque otras personas te atacan o te quieren, sino que a que maestro estas eligiendo de manera que o puedas ver tus experiencias de otra manera, y experimentes paz, que es por eso que el Curso nos recuerda, "Tu percepción invertida ha sido la ruina de tu paz. Te has visto a ti mismo como que estás dentro de un cuerpo y a la verdad como algo que se encuentra fuera de ti, vedada de tu conciencia debido a las limitaciones del cuerpo. Ahora vamos a tratar de ver esto de otra manera." W-72.8.10:3-5

O puedes elegir ver tus experiencias tal y como tu las urdiste.  "Así es como surgieron todas las ilusiones. El que las teje no se da cuenta de que es él mismo quien las urde ni cree que la realidad de éstas dependa de él. Cualquiera que sea su causa, es algo completamente ajeno a él, y su mente no tiene nada que ver con lo que él percibe. No puede dudar de la realidad de sus sueños porque no se da cuenta del papel que él mismo juega en su fabricación y en hacer que parezcan reales." T-27.VII.7:6-9

Recuerda, si crees que las cosas te están sucediendo a ti (personas te están atacando), obviamente tienes que sentirte como la víctima inocente y por lo tanto justificar tu posición que de por si no te libera sino que te aprisiona, cuando la realidad es que, "No soy víctima del mundo que veo." W-pI.31

Para poder tomar responsabilidad y permitir que un Nuevo Maestro (Espíritu Santo) nos libere de nuestra propia prisión tenemos que reconocer que "El secreto de la salvación no es sino éste: que eres tú el que se está haciendo todo esto a sí mismo. No importa cuál sea la forma del ataque, eso sigue siendo verdad. No importa quién desempeñe el papel de enemigo y quién el de agresor, eso sigue siendo verdad. No importa cuál parezca ser la causa de cualquier dolor o sufrimiento que sientas, eso sigue siendo verdad. Pues no reaccionarías en absoluto ante las figuras de un sueño si supieses que eres tú el que lo está soñando. No importa cuán odiosas y cuán depravadas sean, no podrían tener efectos sobre ti a no ser que no te dieses cuenta de que se trata tan sólo de tu propio sueño." T-27.VIII.10:1-6

La ventaja de tener al Espíritu Santo como nuestro Maestro es que no eres tú la que tienes que hacer el trabajo de erradicar la culpa pues es por eso que el curso nos recuerda, "Tú no puedes ser tu propio guía hacia los milagros, pues fuiste tú el que hizo que fuesen necesarios. " T-14.XI.7:1. A ti lo único que se te pide es que estés dispuesta a reconocer que no sabes absolutamente nada, de manera que el Espíritu Santo pueda hacer Su trabajo.

Ojo! Este trabajo de elegir un nuevo Maestro es para que poco a poco se deshaga nuestra identidad. Esa es la razón por la cual el Curso es tan aterrador para muchos. Pues literalmente estamos empezando a deshacer el yo que se cree estar aquí de manera que pueda yo desaparecer de esta ilusión. Es por eso que el curso nos recuerda, "No hay afirmación que el mundo tema oír más que ésta: No sé lo que soy, por lo tanto, no sé lo que estoy haciendo, dónde me encuentro, ni cómo considerar al mundo o a mí mismo.” T-31.V.17:6-7

Ahora, para ir a la segunda parte de tu pregunta en un contexto mas dual, cuando preguntas porque es que las personas atacan, es por la misma razón que todos juzgamos, que por cierto, el ataque es una forma de juzgar, y es porque tenemos miedo. En este mundo nos encontramos como niños desamparados, alejados de nuestro Padre, y por lo tanto buscando como satisfacer nuestras necesidades a través de otras personas, a través de lo que hagamos en el mundo. Pues al sentirnos necesitados emocionalmente, cuando las cosas no se dan como queremos, cuando nuestras necesidades no son proveídas, atacamos. Mas nada.

Cristo, al poder pasar por alto en comportamiento (forma), observaba lo mismo que todos observamos, personas atacando, solo que no juzgaba la experiencia como tal. Su amor no podía ser de ninguna manera alterado por lo que las ilusiones estuviesen haciendo “No importa cuán odiosas y cuán depravadas sean, no podrían tener efectos sobre ti a no ser que no te dieses cuenta de que se trata tan sólo de tu propio sueño." T-27.VIII.10:6

Que mejor ejemplo que aceptar la crucifixión sin juicio. Cada persona que nos “ataca”, y reaccionamos a ese aparente ataque, es nada mas que una espada que nosotros mismos nos estamos atravesando, solo que creemos que es algo que nos están haciendo a nosotros. Inclusive, este extracto del curso prácticamente sumariza todo lo que el curso nos esta recordando, “Si algo te puede herir, lo que estas viendo es una representación de tus deseos secretos. Eso es todo. Y lo que ves en cualquier clase de sufrimiento que padezcas es tu propio deseo oculto de matar.” T-31.V.15:8-10

Una persona (proyección) que nos “ataca”, al invitar al Espíritu Santo, a través de un cambio de mentalidad, El nos enseña a pasar por alto el comportamiento y darnos cuenta de que ese ataque es nada mas que una petición de amor de un niño atemorizado que esta detrás de ese adulto que supuestamente nos esta atacando. Y ese niño atemorizado es nuestro propio miedo proyectado afuera.

Por lo tanto, la petición de amor no viene de afuera, sino que es nuestra propia mente buscando sanar, y hasta que no reconozcamos que ese niño es uno mismo, no permitiremos que el Espíritu Santo nos ayude a reconocer la verdad en esa y cada experiencia que tenemos en el “mundo.”