Esta persona me hizo una pregunta la cual comente sobre ella. La nota la titulé ¿No Puedo Con Lo Que Está Pasando en mi Pais? y se puede leer a través del siguiente enlace de mi blog:
http://theradicalkid.blogspot.com/2014/02/no-puedo-con-lo-que-esta-pasando-en-mi.html
Al parecer la persona todavía tiene un poco de confusión y de lo que comenté me preguntó lo siguiente:
Pregunta: “Nick
créeme que entiendo la base del curso, y eso me hace sentir peor, si lo
que veo es mi proyección ENTONCES QUE SOY? UN MOUNSTRO? No se que
hacer!!!!”
Comentario: No eres un mounstro, eres el
Santo Hijo de Dios que se cree estar en un mundo lleno de monstruos.
Pero no hay mounstros, solo un sueño de separación. Eso es todo. Y tus
hermanos no son mounstros, son el Santo Hijo de Dios que al elegir el
miedo en su mente se comportan de esa manera.
Por lo tanto esto
podrías hacer. Siéntate en silencio, y por un momento deja de poner tu
atención en lo que está sucediendo con tu país, en lo que los monstruos
jejeje aparentan están haciendo.
Descansa en esa paz, en este
instante, y desde ahí, no juzgues, no analices, simplemente siente y
descansa ahí. En tu mente puedes decir algo como, “Espíritu Santo
gracias por este instante santo Contigo. Gracias por recordarme que solo
este instante es verdad y nada mas. Ayúdame en cada momento que me
sienta distraída, que tengo este espacio para que Tu sanes mi mente de
todo miedo.”
Simplemente descansa en ese espacio, y el
Espíritu Santo continuará haciendo Su trabajo. Con el tiempo se te será
mas fácil mantener tu atención en esos espacios y las distracciones
(mounstros) del mundo dejarán de tener poder sobre ti, y podrás entonces
recordar que tu no eres el personaje que vive en Venezuela sino que mas
bien eres la observadora del Hijo de Dios actuando en base a su miedo.
Solo
que ahora su miedo no lo compartes. Simplemente sabes que no tiene nada
que ver contigo sino que estás observando las consecuencias de lo que
es elegir el miedo.
Sin embargo, al tú estar eligiendo la Verdad,
sin tratar de cambiar tu mundo, simplemente no dejándote distraer de
el, entonces podrás tu decir, “Padre perdonalos porque no saben lo que hacen.” Y lo que hacen es hacerse daño a si mismos. Eso es todo!
Eso
es lo que hago cuando experimento miedo o juicio. Me cacho en ese
momento y descanso en ese instante y nada mas. Es así como me recuerdo
que mis pensamientos internos o proyectados son solo eso.
Solo
en ese instante santo tengo acceso a la paz de Dios, y lo que suceda
“fuera” no me puede distraer. Y si me distráe, elijo de nuevo y continúo
haciendo el proceso. Por eso se nos dice, "perdona setenta veces
siete."
Pero este proceso requiere mucha practica,
mucho deseo de querer la paz. No obstante, según vas experimentando más
y más de esa paz el proceso se simplifica.
Por lo tanto, empieza
por ahí, por descansar en el silencio sin prestar atención a lo que
sucede “fuera” y verás como el proceso trabaja.