Pregunta: “Hola,
NICK felicitando por tu excelente gira. Dime amigo, ¿por qué la mente
siempre está distraída por los pensamientos internos y también externos?
¿Cuando en realidad es lo mismo? Un abrazo de luz querido AMIGO.”
Comentario:
La mente no está distraída con pensamientos ni internos ni externos.
Todo esto es un pensamiento, toda esta experiencia es un pensamiento. El
problema es cuando interpretamos los pensamientos, cuando juzgamos los
pensamientos, cuando les damos significado, que eso es lo que los hace
"reales" y por consiguiente nos distrae de la Verdad. Por algo el curso
constantemente, una y otra vez nos recuerda que no sabemos nada, que
nada de lo que vemos significa nada, que nunca estamos disgustados por
la razón que creemos y así sucesivamente.
Por lo tanto, cuando
nos dejamos distraer por la culpa inconsciente, eso que es lo mismo,
empezamos a verlo como diferencias, las cuales etiquetamos, separamos, y
le damos jerarquía de valores. Así es como se le proyecta significado o
sentido a lo que intrínsecamente no tiene sentido ni significado.
Y este mundo no tiene significado salvo el que yo le adjudico. Por eso hay lecciones especificas en el curso como: “Mis pensamientos sin significado me están mostrando un mundo sin significado.” W-pI.11 “Estoy disgustado porque veo un mundo que no tiene significado.” W-pI.12
Pero
cuando empezamos a tomar consciencia de que todo es lo mismo, se deja a
un lado las interpretaciones, los juicios, se les deja de dar valor. En
otras palabras se le deja de proyectar significado al mundo y por
consiguiente la mente descansa en paz, aun cuando todavía aparente “ver”
o mejor dicho, percibir pensamientos “internos” o “externos”.
Aunque
sabemos que no hay pensamientos ni internos ni externos, pero ese es el
lenguaje que utilizamos para diferenciar entre lo que creemos percibir
como pensamiento interno cuando los ojos están cerrados y lo que creemos
recibir como “realidad” (pensamiento externo) cuando los ojos están
abiertos. Pero es todo lo mismo.