Comprendo que el título de este artículo puede sonar un poco rudo, pero
según lo lees te darás cuenta de que en realidad es muy amoroso.
Ayer
estuve compartiendo con una muy buena amistad y me decía que en el
mundo de las formas ella simplemente deseaba una casa, aunque sea
pequeña, pero mas bien un espacio donde pueda sentirse tranquila, donde
no tenga que preocuparse por la situación económica con la que se
enfrentaba, y que pudiese descansar.
Le comenté que si
deseaba esa casa, que podría simplemente moverse en dirección a buscar
información acerca de ella, solo que lo hiciese sin apego ni
expectativas. Una persona que está consciente de ello, simplemente hace
lo que hace en el mundo, sin apego sicológico.
No obstante, hay algo que tenemos que tener claro, pues el sistema de pensamientos del ego (miedo) se le puede subestimar.
A
esto es a lo que me refiero. Todo deseo que tenemos de algo en este
mundo proviene de la idea de que hay algo aquí que me pueda hacer feliz,
que me puede brindar paz. Y es otra manera de querer conservar un mundo
que por alguna razón no quiero soltar por miedo al Verdadero Mundo.
En
realidad, aunque parezca un deseo inocente, detrás de ese deseo lo que
está es el miedo a despertar de este mundo, ya que dejar este mundo a un
lado simboliza la perdida algo. Cuando en realidad, soltar este mundo
es la ganancia del todo! Pero hay que ir por partes.
Por lo
tanto, el desear una casa, o un carro, o un trabajo, o dinero, o una
pareja, o lo que sea no es el problema, es pretender que no deseamos eso
es el problema. Porque en la pretensión de que el deseo no esta ahí,
hay una negación, un sentido de sacrificio que no nos apoya hacia el
poder soltar esta experiencia.
Por lo tanto, cuando el curso nos dice por ejemplo, "He dicho repetidamente que el Espíritu Santo no quiere privarte de tus relaciones especiales, sino transformarlas,"
T-17.IV.2:3 el sistema de pensamientos del ego se encaja en la primera
parte de esa oración, y busca las relaciones especiales sin darse cuenta
que a lo que el curso se está refiriendo es que al darte la oportunidad
de satisfacer ese "deseo" solo que esta vez con la mente del Espíritu
Santo, se te va a enseñar que ahí no hay nada.
Y esa experiencia
te va a llevar no a apegarte mas a eso que tanto deseabas, sino que a
soltarlo, ya que una vez mas, mientras mas rápido sueltas tu mundo, mas
rápidamente te abres al mundo que de verdad deseas.
Por lo
tanto, ahí es donde el curso hace hincapié de que el sacrificio no es
necesario para tu salvación, sino que el abrirte a un nuevo sistema de
pensamientos mientras todavía te encuentras experimentándote como un ser
humano que tiene deseos.
A medida que la mente se va
transformando, los deseos también se irán transformando con ella. Y
llegará el momento que aunque tengas la casa o no, sabes lo que de
verdad quieres. Y ninguna de las distracciones de este mundo se
interpondrán en lo que realmente deseas, lo cual es la paz de Dios.
No
obstante, todo lo que deseas en este mundo te conducirá a la muerte, no
porque lo que desees te va a matar, a menos que tengas como pareja un
psicópata jejeje. Sino que en este mundo de las formas, todo termina en
muerte. El cuerpo va a morir tengas un millón de dólares o no, tengas
una mansión o no, tengas una o múltiples parejas o no, tengas lo que
tengas, hagas lo que hagas, digan lo que digan los demás… Ups, se coló
esa canción de Rafael jejeje!
No importa lo que suceda en este
mundo para tu "beneficio" o para lo contrario, tu destino en el mundo
físico ya está escrito por el ego, vas a morir!
Tu
destino Verdadero no obstante sigue siendo el mismo, vas a regresar a tu
estado natural de pura dicha, regocijante paz, permanente felicidad,
infinita abundancia, solo que no la puedes experimentar ahora por
todavía querer desear el mundo de la muerte.
¿Por qué no mejor intercambiar este mundo por uno que de verdad deseas? ". "No
estamos haciendo hincapié en que renuncies al mundo, sino en que lo
intercambies por algo mucho más satisfactorio, algo rebosante de alegría
y capaz de ofrecerte paz. ¿Crees acaso que este mundo puede ofrecerte
eso?" W-pI.129.1:3-4
Mientras tanto, no estoy diciendo que
niegues tus deseos, ni que hagas sacrificios sino que simplemente
obsérvalos muy cuidadosamente porque si no estás consciente, se
convertirán en tus nuevos dioses. Y finalmente, tarde o temprano, como
en este mundo todo cambia, al no haber nada permanente, esos dioses que
tanto adorabas e idolatrabas te van a desilusionar. ¿Por qué? "Cualquier
cosa en este mundo que creas que es buena o valiosa, o que vale la pena
luchar por ella, te puede hacer daño y lo hará." T-26.VI.1:1
Así que lo que sea que hagamos en el "mundo" es irrelevante. Pero si queremos experimentar la verdadera felicidad, la verdadera alegría, la verdadera paz, tenemos que ser conscientes del sistema de pensamiento con el que nos estamos identificando en cada momento.
Solo hay dos sistemas de pensamiento. Bueno, en realidad sólo hay uno; Amor. El "otro" sistema de pensamiento es, no lo contrario al primero, sino que la ausencia o negación del primero. Realmente no hay oscuridad, sólo la ausencia de luz. Realmente no hay miedo, sólo la ausencia de amor. Realmente no hay mundo físico, simplemente la negación del mundo Real.