Hay
ciertas cosas en el mundo que en términos prácticos que necesitamos o
queremos. Sin embargo algunas de ellas pueden convertirse en ídolos.
Dinero, las relaciones, los objetos materiales, posiciones sociales o de
negocios, etc. Así que, ¿cómo saber cuando algo se ha convertido en un
ídolo?
La respuesta más obvia es que cuando no estás dispuesto a
dejar algo en manos del Espíritu Santo, es un ídolo para ti. Se ha
convertido en un fin en sí mismo y no un medio de apoyo o que te pone en
un lugar determinado en un momento determinado para que puedas cumplir
con tu papel como maestro de Dios. Cuando algo es un fin para ti más que
un medio, crees que lo necesitas para tu salvación.
Por
ejemplo, una persona ambiciosa puede entregar todo en su vida al
Espíritu Santo - excepto sus metas profesionales. Todavía piensa que
necesita alcanzar una determinada posición para tener éxito (sentirse
lleno), para obtener reconocimiento (amor), o para generar mucho dinero
(obtener seguridad). En esta circunstancia, su carrera es un sustituto
de Dios - es un ídolo. Ese tipo de persona no se ve a sí mismo en la
posición que está para que el Espíritu Santo puede trabajar a través de
él/ella desde ese lugar. Ese tipo de persona ve la consecución de esa
posición, o la misma posición, como algo significativo en sí mismo.
Otro
signo de que tiene ídolos es cuando no puedes vivir en el presente.
Estás siempre proponiéndote metas y esforzándote. Esto significa que
piensas que tienes que alcanzar alguna meta u objeto para ser feliz,
para estar en paz, para sentirte lleno. Cuando realmente has entregado
tu vida al Espíritu Santo vives en el presente, porque no te encuentras
buscando. El futuro se convierte en una extensión de tu paz presente y
no te preocupas por él.
Una relación se convierte en un ídolo
cuando sientes que no puedes vivir sin una persona determinada. Es un
ídolo cuando insistes en que esa persona "satisfaga tus necesidades" de
manera que pueda permanecer en tu vida. Cuando se mira a un cuerpo / ego
para suministrarte algo es un ídolo, porque el verdadero propósito de
las relaciones es recordar Unicidad al pasar por alto el cuerpo / ego.
Las personas en tu vida están ahí para ser tus maestros en la Unidad y
con amor apoyarte en tu papel como maestro de Dios.
Todo lo que
necesitas para cumplir con tu papel en el mundo va a ser suministrado.
Confiando así es como los ídolos caen porque no tienes que buscar lo que
ya tienes.
Para información sobre Liz Cronkhite y su
trabajo con Un Curso de Milagros, o para alguna consulta privada visita
su pagina web: www.ACIMMentor.com (Liz solo habla Inglés).