Comentario: No es complicado, en realidad es muy simple, no obstante, entiendo tu confusión. Así que vamos por partes. Estás confundiendo la verdadera felicidad por lo que tu interpretas como "felicidad" cuando por ejemplo dices: "¿entonces cuando me siento feliz por algo también eso tengo que perdonar al igual que lo que pasa con el dolor? y si es así ¿como se perdona algo que me hace tan feliz y como es que debemos vivir en el mundo sin sentir nada?"
Cuando algo en el mundo te hace feliz, no te estás identificando con la verdadera felicidad ya que lo que te hace feliz es lo que esté sucediendo en el "mundo". Y por lo tanto, aquí aplica la lección "No soy víctima del mundo que veo." W-pI.31 Pues lo que esa lección nos dice es que tu mundo no determina tu estado mental (placer o dolor, felicidad o tristeza). No obstante, eso no significa que no puedas disfrutar y deleitarte de las experiencias de vida que te gusten.
Lo que si significa es que al no identificarte con ellas como tu fuente, no caes en la trampa que inconscientemente el sistema de pensamientos del ego está poniendo como trampa para que caigas una ves mas en tu identificación con la forma (cuerpo, mundo). Porque recuerda que si algo en el mundo tiene el poder de hacerte feliz, también tiene el poder que quitarte tu felicidad. Una vez mas, eso no es negar tus experiencias, sino que estar consciente del juego sicológico del ego.
Recuerda que todo lo que el ego quiere es que hagas real lo que no es real. Y este mundo al igual que tu experiencia aquí no es real. Y por lo tanto, lo que no es real, no es permanente. Y los placeres son placenteros. Pero la verdadera felicidad es permanente.
Ahora, tienes que tener en cuenta de que la razón por la que hay un "mundo", y nos experimentamos como "cuerpos" que viven en él, es por el miedo que inconscientemente le tenemos al Amor, a Dios. Y la culpa inconsciente es el temor que sentimos por haber creído separarnos de Dios, y que ahora Dios nos va a "castigar" por habernos separado de El. Por lo tanto, nos escondemos en un cuerpo que se proyecta en un mundo ajeno al de Dios.
Esa es la culpa inconsciente que el Espíritu Santo está erradicando de la mente para que regreses, o mejor dicho, para que dejes de poner tu atención en este mundo y retornes tu atención el Lugar (Reino, Donde Tu y Dios son lo mismo) del que nunca te fuiste. Sin embargo, lo que hace este proceso difícil, no solo son los dolores que experimentamos aunque son los dolores los que nos conllevan a la búsqueda espiritual, sino que los placeres ya que ellos son las ataduras mas fuertes a esta experiencia. Y como no queremos soltar esta identidad falsa, por miedo a Dios, no las pasamos buscando placeres para por lo menos hacer esta experiencia mas cómoda.
Pero como este es un mundo dual, lo que sube tiene que bajar. En otras palabras, detrás de todo placer tiene que haber un dolor. Que por algo el curso nos recuerda: "El pecado oscila entre el dolor y el placer, y de nuevo al dolor. Pues cualquiera de esos testigos es el mismo, y solo tienen un mensaje: ‘Te encuentras dentro de este cuerpo, y se te puede hacer daño. También puedes tener placer, pero el costo de este es el dolor’. A estos testigos se unen muchos más. Cada uno de ellos parece diferente porque tiene un nombre distinto, y así, parece responder a un sonido diferente. A excepción de esto, los testigos del pecado son todos iguales. Llámale dolor al placer, y dolerá. Llámale placer al dolor, y no sentirás el dolor que se oculta tras el placer. Los testigos del pecado no hacen sino cambiar de un término a otro, según uno de ellos ocupa el primer plano y el otro retrocede al segundo”. T-27.VI.2:1-9
Por lo tanto, volviendo a tu pregunta, el trabajo del curso es para que experimentes la verdadera dicha, la verdadera paz, la verdadera felicidad a la cual tienes acceso al identificarte con lo que tu realmente eres. Y esa dicha no es de este mundo, aunque la puedes experimentar aquí cuando tu mente se sana de toda culpa, de todo miedo. Y una vez mas, el miedo se va erradicando cuando la identificación deja de ser con la forma (personaje, mundo) y el enfoque es en la Mente (Verdad).
Eso sucederá muy gradualmente a medida que tu continúas eligiendo la paz de Dios sobre todas las cosas. Y mientras tanto, disfruta de cada vez que te sientes feliz y de las experiencias que te acompañan en ese sentimiento de felicidad. Aprender a mirarlas como recuerdos de que Dios solo quiere que seas feliz. Solo que no las idolatres. A mi me gusta tener dinero, pero no lo idolatro. A mi me gusta tocar guitarra, pero no la idolatro. A mi me gusta compartir con una mujer, pero no la idolatro. A mi me gustan hacer cosas en el "mundo" pero no las idolatro. A mi me gusta sentir el cuerpo sano, pero no lo idolatro. A mi me gusta viajar, pero no lo idolatro. A mi me gusta escribir, pero no lo idolatro, y así sucesivamente.
Sin embargo, todavía reconozco que hay apegos en algunas áreas, y ahora lo que hago es que los reconozco y hago mi trabajo del perdón. Pues mi objetivo es no idolatrar nada de este mundo, solo idolatrar a Dios! El cual es mi Fuente!