Pregunta: "Gracias!!!
y entiendo lo de no convertirte en maestro, de hecho esa fue la razón
principal por la que me alejé del grupo y hasta del mismo curso o en
otras palabras de Jesús o Espíritu Santo, necesitaba urgentemente sentir
que era dueña de la soberanía de mi mente y que en mí ya estaba todo lo
que necesitaba, sobretodo después de tanto tiempo de practicar el
curso.
Pero evidentemente no es así y si necesito
sentirme apoyada no sólo por fuerzas etéricas y obviamente no sé cómo
gobernar mi vida por mi cuenta. En realidad no sé si lo que más me
convenga ahora sea volver al curso, pues siento que ese aprendizaje ya
se desgastó en mi. Ni siquiera sé cómo me puedes ayudar, te escribí en
una acción desesperada de pedir ayuda después de haber visto cómo fluye
en paz tu mente.
Mi mente es un campo de batalla tremendo
en donde lidio constantemente con intentos de suicidio, sintiéndome
muchas veces como poseída. Me odio con locura y ningún aspecto de mi
vida fluye. En todo soy un constante autosabotage y nada parece estar
ahí para evitarlo, así que eso de estar tranquila porque mi vida está a
cargo del Espíritu Santo no lo creo del todo.
Una vez más
te agradezco mucho tu disponibilidad y disposición para ayudar, me
encantaría poder sentir la paz de la que hablas, y sería genial
escucharte: Gracias!
Comentario: Cuando dices, "así que eso de estar tranquila porque mi vida está a cargo del Espíritu Santo no lo creo del todo."
Lo que quiero decir es que tu propio dolor esta llevándote a que te
rindas, y cuando finalmente te rindas entonces vas a poder permitir que
el amor de Dios opere a través de ti.
No obstante, lo que tu has tratado de hacer es, citando tus mismas palabras, "necesitaba
urgentemente sentir que era dueña de la soberanía de mi mente y que en
mí ya estaba todo lo que necesitaba, sobretodo después de tanto tiempo
de practicar el curso."
Ahí te habrás dado cuenta de que
no entendiste el mensaje del curso, pues tu no eres la dueña de la
"soberanía" de tu mente. No obstante, puedes dejar de proteger la
soberanía de tu mente y permitir que un nuevo sistema de pensamientos se
acapare de ella. De eso si eres dueña, de decidir con que maestro te
vas a identificar en tu mente, ego (que no es en si un maestro sino que
una creencia) o el Espíritu Santo (el Unico y Verdadero Maestro)
Yo
también tengo momentos que no estoy en paz, pues mientras me siga
identificando con el "yo" que se cree estar aquí, estoy a merced de un
sistema de pensamientos dual. Pero diariamente practico mis espacios de
silencio, de comprensión, del perdón, y puedo retornar la mente a ese
espacio mas a menudo.
Pero no soy perfecto, soy el Hijo de Dios,
tal como tu lo eres, que todavía quiere sentirse especial y por lo tanto
me pierdo un poco en el mundo de las ilusiones. Pero estoy consciente
de ello y por lo tanto puedo elegir de nuevo.
Así que tu
situación no es ni mala ni buena, es simplemente la experiencia que
estás teniendo ahora, para que una y otra vez te rindas de corazón y
permitas que el Espíritu Santo sea tu Guía. El curso te apoya de esa
manera, solo que tu ego te está llevando a través del miedo para que
evites hacer el trabajo.
Te recomendaría que leyeses La
Desaparición del Universo por Gary Renard. Empieza por ahí para que
puedas retomar el curso, pues ese libro es un buen abre-latas del curso.
Y
una vez mas te repito que tu vida se está desenvolviendo perfectamente
para tu reconocimiento de la Verdad en ti. No juzgues tu situación,
simplemente respira profundamente, y no tengas miedo de buscar ayuda si
esa pueda ser la de un terapeuta en lo que te vas poco a poco
encaminando.
Mientras tanto, si decides leer el libro de Gary, o
decides buscar algún tipo de ayuda, simplemente empieza desde ahora a
elegir tu paz interna. Y aunque no creas que puedas, simplemente
practica un minuto, dos minutos cuando te levantas y durante el día, y
poco a poco vas a ir entrenando tu mente.
Y créeme que tu
experimentarás esos espacios de paz y desde esos espacios confía en que
el apoyo que necesites se te proveerá, y una vez mas, si necesitas algún
apoyo como un terapeuta, si sigues eligiendo tu mente recta, aun cuando
no sientas nada y creas que lo estas haciendo "mal", el Espíritu Santo
te dirigirá en la dirección correcta para ti.
Este es un proceso
que requiere paciencia y confianza. Solo que escucha lo que te digo a
través de esta nota, no estás sola, estás apoyada y amada profundamente
por Dios, y por lo tanto, continúa practicando por lo mas mínimo que sea
elegir la paz de Dios. En otras palabras, suelta, suelta, suelta, que
se derrumbe tu mundo, pues a fin de cuentas, nunca lo controlaste y
nunca lo controlarás. Por algo mi libro se titula: Lo Que Pasa Cuando
Dejas Ir.
Y ese estado de aceptación es ser libre, que eso eso Lo
Que Pasa Cuando Dejas Ir. Y el que no controles tu mundo no significa
que tu vida será una catástrofe, simplemente significa que estas
confiando en la Vida y no en ti personalmente, que por cierto, mira a
donde tu "soberanía" te ha llevado. ;)
Estás en buenas manos,
deja a un lado tus expectativas, tus juicios sobre ti misma y acepta tu
vida ahora mismo tal y como es para que el Espíritu Santo puede
encargarse de ella. Entrégate completamente! Y desde ese espacio
experimentaras esa paz que sobre pasa todo entendimiento!
Pues al
aceptar tu vida tal y como es, la resistencia del ego ya no tiene poder
sobre ti. No obstante, si resistes tu experiencia simplemente la estas
planteando firmemente ahí, y no puede salir pues Cristo no puede
erradicar de tu mente lo que tu tan profundamente no quieres soltar, aun
cuando tu crees que de verdad quieres soltar eso. Recuerda, "Cuando crees que estás proyectando lo que no deseas, es porque todavía lo deseas." T-12.VII.7:6
Así que tranquila, un pie en frente al otro. Perdona y confía, eso es todo!