Pregunta: "Hola
Nick, me dió mucho gusto verte en Guadalajara y ver todo lo que
compartiste en tu viaje por México. Quiero preguntarte cómo puedo
decidir por la Paz cuando MI culpa en la ilusión no me deja. Entiendo
que la misión de la ilusión es distraernos del verdadero trabajo
interior conmigo misma pero también entiendo que no puedo negar mi
experiencia aquí ni cómo me siento y tampoco cómo he hecho sentir a los
"demás". Entonces, cómo puedo manejar la culpa y el daño que hice con
mis palabras a "alguien"? (yo misma?)
Aunque
entiendo que no hay nadie afuera, siento caer en una negación y en no
asumirlo, y si lo hago, además de insistir en elegir la Paz, cómo debo
hacerlo con respecto a la persona que lastimé?Quisiera aclarar tantito
mi pregunta. No me refiero a si debo pedir disculpas o qué hacer con
esta persona , que claro en en el " mundo " se requiere. Pero hablo del
sentimiento de culpa y tristeza que siento.... Como manejarlo? A eso me
refiero. Sorry por acudir a ti con esta duda que puede ser de kinder.
Gracias Nick"
Comentario: En realidad tu no
tienes el poder de lastimar a nadie de la misma manera que nadie tiene
el poder de lastimarte a ti. Tu creencia en que alguna persona te puede
lastimar genera una culpa que ahora tu te la adjudicas a ti y se la
proyectas a un mundo lleno de gente que tu crees poder lastimar.
Recuerda, el Hijo de Dios nada ni nadie lo puede lastimar. Y tu no
tienes el poder de lastimar a nadie porque tu no estas aquí. Obviamente
aunque en el mundo físico, en el mundo de lo ilusorio (en el que crees
estar) si atacas a algún otro "cuerpo" lo puedes lastimar, estamos
hablando del contenido.
A quien tu siempre lastimas es a
ti misma. Eso es lo primero que tienes que tener claro. Esa persona a
la que tu crees haber lastimando es a ti misma, y ¿como lo sabes?
Observa como te sientes. Hasta que tu no tengas claro en tu mente que
todo ataque o juicio te lastima a ti, no vas a desarrollar la motivación
de dejar de juzgar y atacar. Esa es la primera fase. Vamos ahora a la
segunda, Un curso de Milagros nos recuerda que, "Una mente sin entrenar no puede lograr nada." W-pI.In.1:3
También el curso nos recuerda que: "He
dicho que no puedes cambiar de mentalidad modificando tu conducta, mas
he dicho también, y en muchas ocasiones, que puedes cambiar de
mentalidad." T-4.IV.2:1 Por lo tanto, el comportamiento (conducta)
no es lo que tu quieres corregir, sino que tu mentalidad debido a que el
comportamiento simplemente está dando testimonio de la mentalidad que
la motiva. Por eso es que el curso nos recuerda, "Tú no puedes ser tu propio guía hacia los milagros, pues fuiste tú el que hizo que fuesen necesarios."
T-14.XI.7:1 Sin embargo, quien me está haciendo esta pregunta es un ego
desesperado que ahora quiere buscar la manera de corregir un error.
Vamos
ahora al grano. Por lo general, uno de los errores fundamentales que
estudiantes del curso comenten es que esperan a que algo fuerte suceda
para aplicar el perdón, creyendo que el perdón es una barita mágica para
erradicar la culpa. Sí, es la herramienta, pero recuerda que la culpa
inconsciente de la que estamos hablando es la de creer que la separación
de Dios ocurrió, y de que vamos a ser castigados por haber tomado esa
decisión de separaos del Padre.
Por lo tanto, toda esta experiencia simplemente da testimonio de ese error. Por algo el curso nos recuerda: “Los
sueños que te parecen gratos te retrasarán tanto como aquellos en los
que el miedo es evidente. Pues todos los sueños son sueños de miedo, no
importa en qué forma parezcan manifestarse. El miedo se ve adentro o
afuera, o en ambos sitios. O puede estar oculto tras formas agradables.
Pero nunca está ausente del sueño, pues el miedo es el elemento básico de todos los sueños.” T-12.IV.2:1-5
A
esto es que voy. ¿Practicas tu el perdón cuando te sientes un poco
apresurada para ir al trabajo? ¿Practicas tu el perdón cuando algún
pensamiento, por mas insignificante que sea te preocupe? ¿Practicas tu
diariamente reconocer que todo es un sueño, aun cuando estas
experimentando algún placer? Practicas tu el perdón cuando sientes algún
tipo de incomodidad, molestia, ya sea porque tu pareja no le puso la
tapa a la pasta de dientes y eso te incomodó? ¿Practicas tu el perdón
cuando estas viendo una película, telenovela, anuncio de televisión o lo
que sea que cause algún tipo de emoción en ti? En otras palabras,
¿estas consciente de este trabajo en todo momento? Porque si no
practicas con lo mas simple, con lo mas diminuto, con lo mas cotidiano,
no pretendas desesperadamente aplicar el perdón y tener alguna
contestación o sanación cuando estás en el medio de un torbellino.
Ahora,
aun así, puedes salir de ese torbellino si de corazón quieres la paz de
Dios, y no respuestas a tus inquietudes o soluciones mágicas. En otras
palabras, aquí tienes la formula perfecta para lo que tu estas
experimentado, si de corazón la quiere aplicar. Y es:
"Debo haber decidido equivocadamente porque no estoy en paz.
Yo mismo tomé esa decisión, por lo tanto, puedo tomar otra.
Quiero tomar otra decisión porque deseo estar en paz.
No me siento culpable porque el Espíritu Santo, si se lo permito anulará todas las consecuencias de mi decisión equivocada.
Elijo permitírselo, al dejar que Él decida en favor de Dios por mí." T-5.VII.6:7-11
No es cuestión de darle vueltas en tu cabeza a la culpa, pues eso es lo que has estado haciendo, es sinceramente, de todo corazón,
empezar a brindarte esos espacios de silencio, de instantes santos, de
empezar a con el Espíritu Santo mirar la experiencia física de otra
manera. Y esto es un proceso que requiere tiempo, paciencia, y un deseo
profundo de querer esa relación con tu Ser y no de pedirle al Espíritu
Santo que te quite la culpa que sientes cada vez que tu comportamiento
refleja el haber elegido el sistema de pensamientos del ego. Que lo
continuaras eligiendo si no estas consciente en cada momento. Por algo
se nos recuerda a través del curso: "Observa cuánta vigilancia has estado dispuesto a ejercer para proteger a tu ego, y cuán poca para proteger a tu mente recta." T-4.III.10:3
Por
lo tanto, lo que tienes que hacer ahora es tomar la decisión de que un
Nuevo Maestro empiece a ejercer poder sobre tu mente y eso lo tienes que
decidir tu, una vez mas, no cuando cosas incomodas sucedan sino que
desde ahora. Pues Cristo no puede erradicar de ti lo que tu no quieres
soltar. Por algo se nos recuerda: "De nada te serviría el que yo
menospreciase el poder de tu pensamiento. Ello se opondría directamente
al propósito de este curso. Es mucho más eficaz que te recuerde que no ejerces suficiente vigilancia con respecto a tus pensamientos." T-VII..5-7