Comentario: La culpa interna es la que da lugar a la proyección. Por lo tanto, mueras de muerte natural, suicidio, enfermedad, accidente, etc., sí todavía hay culpa inconsciente continuarás proyectando otro cuerpo para esconderte de Dios.
Pero sí prácticas el perdón para deshacer la culpa inconsciente, cuando se erradique esa culpa te liberas del miedo a Dios y al momento de dejar el cuerpo a un lado no se tendrá que proyectar (reencarnar) en "otro." Y el suicidio no entra en está ecuación porque sin culpa interna no abría razón para suicidarse.