¿Sigo los Ejercicios Donde los Dejé o Comienzo de Nuevo?

Pregunta: “Hola Nick, hace como un año llegó a mis manos un curso de milagros. Empecé a hacer los ejercicios, a leer el texto y a ver videos tuyos y de otros estudiantes del curso. Lo estoy haciendo sola y de repente siento que hay partes que no entiendo bien, así es que dejé de practicar los ejercicios y me puse a leer La Desaparición del Universo. En algún momento tú recomendabas leer este libro y lo hice, me siento muy agradecida por eso. Mi pregunta es: ¿Cual es tu opinión: sigo los ejercicios donde lo dejé o comienzo de nuevo? Voy en la lección 80. Nick gracias por compartir tu experiencia y de tu generosidad con nosotros. Te agradezco de corazón lo que me has ayudado a aclararme. Un abrazo a la distacia”

Comentario: Según como tu te sientas siempre y cuando no hagas de los ejercicios lo que el ego quiere que hagas con ellos. Una vez que entiendes el proceso del perdón eso es lo que ahora practicas. Los ejercicios simplemente te van encaminando a que la mente no se desvíe del proceso. Por lo tanto, puedes retomarlos desde esa lección pues a fin de cuentas, el objetivo es mas bien entrenar la mente a perdonar.

Yo los hice una vez y de ahi era cuestión de practicar el perdón. Ve sintiendo cada momento. Cuando te centras en la paz de Dios, el objetivo del libro es que finalmente lo puedas dejar a un lado.

Eso no significa que si quieres seguir leyéndolo que no lo hagas. Pues es un lindo recordatorio y cada vez que lo lees sientes que le sacas algo más. En otras palabras, no hagas del libro un “culto”, hazlo tu compañero de camino y tu sabras cuando no necesites leerlo mas.

Y si la confusión es tan grande: "Haz simplemente esto: permanece muy quedo y deja a un lado todos los pensamientos acerca de lo que tú eres y de lo que Dios es; todos los conceptos que hayas aprendido acerca del mundo; todas las imágenes que tienes acerca de ti mismo. Vacía tu mente de todo lo que ella piensa que es verdadero o falso, bueno o malo; de todo pensamiento que considere digno, así como de todas las ideas de las que se siente avergonzada. No conserves nada. No traigas contigo ni un solo pensamiento que el pasado te haya enseñado, ni ninguna creencia que, sea cual sea su procedencia, hayas aprendido con anterioridad. Olvídate de este mundo, olvídate de este curso, y con las manos completamente vacías, ve a tu Dios." W-pI.189.7:1-5

Pero ojo, a menos que de corazón puedas hacer eso, siento que es mejor seguir haciendo los ejersicios. ¿Y como sabes que estas completamente entregada a tu Dios? Estas en perfecta paz! En otras palabras, esta es la prueba: “Existe una sola prueba -tan infalible como Dios- con la que puedes reconocer si lo que has aprendido es verdad. Si en realidad no tienes miedo de nada, y todos aquellos con los que estás, o todos aquellos que simplemente piensen en ti comparten tu perfecta paz, entonces puedes estar seguro de que has aprendido la lección de Dios, y no la tuya.” T-14.XI.5:1-2