Pregunta: “Hola
Nick, he visto que explicaban que permanecemos ilusoriamente en el
mundo de maya, ya sea como cuerpos o bien con la muerte del cuerpo
permanecemos como almas, hasta elegir otro cuerpo. Esta teoría da fé a
la existencia de reencarnación? Me preocupa también que mis seres
queridos queden atrapados y no sepan despertar. Me podrías explicar
esto? En Este sueño tienen que despertar los 6.000.0000.000 de personas
del mundo? Cuando se dice llegar a casa es mi mente con dios más las
demás mentes que van llegando? Me hago mucho lío.no se . Y si somos una
sola mente...mi madre no es real? gracias!”
Comentario:
Tienes unas cuantas preguntas en tu comentario y son muy simple de
contestar si tenemos claro la diferencia entre la forma y el contenido.
Otra manera de decirlo, entre el sueño y la Realidad.
Preguntas o dices: “…o bien con la muerte del cuerpo permanecemos como almas, hasta elegir otro cuerpo.”
En realidad no es que hayan “almas separadas”. Lo que hay es una mente
soñando todo esto, por lo tanto cuando un cuerpo se deja a un lado es
simplemente una proyección del sueño que desaparece de el escenario.
No
es que un “alma” se queda entres vidas esperando encarnar ni nada así
por el estilo. Es simplemente que en ese sueño uno de los personajes o
una de las proyecciones aparentemente desaparece. Dado ese el caso, la
reencarnación no puede existir ya que no existen cuerpos reencarnando
sólo una mente soñando una experiencia de separación.
En otras
palabras imagina estar en el cine. La pantalla blanca es sólo una. No
está dividida. Sin embargo cuando se le proyectan imágenes a esa
pantalla la apariencia es que hay muchas diferentes cosas, cuerpos,
edificios, naturaleza. en fin. millones y billones y trillones de
objetos aparentemente “separados”.
Inclusive en la misma
pantalla, o mejor dicho, en la misma película se perciben cuerpos qué
nacen y mueren. Pero todas esas proyecciones nos distraen de lo único
que es verdad, de lo único que es real, lo cual es una pantalla blanca.
Volviendo
a la analogía del sueño para que veas lo simple que es esta
explicación, imagina que tú estás durmiendo y mientras duermes sueñas
que estás hablando con tu hermano. Luego imagina que tu hermano muere.
Tu hermano no tenía un “alma separada” que ahora se encuentra esperando
entre “vidas” para retornar al sueño. Simplemente esa proyección de tu
mente desapareció.
Pero esto no termina aquí. No
sólo tu hermano no era real sino que tú tampoco eras real. Y sin embargo
después de haber despertado de ese sueño tú le cuentas la historia a
tus amistades como si de verdad hubieses tú estado hablando con un
hermano. En otras palabras, es como en el sueño tú de verdad creíste
haber existido.
Vamos a otra de tus preguntas teniendo en mente la analogía de sueño y verás como todo hacer perfecto sentido.
Dices, “Me preocupa también que mis seres queridos queden atrapados y no sepan despertar. Me podrías explicar esto?”
En la mente que está soñándolo todo, estás aparentemente viendo lo que
se perciben como seres queridos, la cual como todo el resto del mundo
son proyecciones que no necesitan despertar te ningún sueño. Y recuerda,
tú te percibes como un ser "vivo" en ese sueño. A eso el curso le llama
el "heroe del sueño" T-27.VIII Otra manera de decirlo, el protagonsita del sueño. El "yo" que se cree estar percibiéndolo todo.
Todas
esas proyecciones son las que se utilizan para distraernos de lo que
realmente somos, Mente. A eso es a lo que se refiere cuando decimos que
nuestra atención está “fuera”.
Cuando descansamos en silencio,
tomando la posición de ser los observadores de la experiencia sin
dejarnos distraer por ella, es que se dice que estamos retornando
nuestra atención hacia el “interior”, donde inclusive desaparece, o
aparenta ir desapareciendo el “yo” que se cree que está observando todas
esas imágenes.
Por eso es que cuando la gente hace preguntas
sobre esta temática no se dan cuenta que quien está preguntando es ese
mismo “yo” que se tiene que deshacer para poder despertar de este sueño.
A esto se refiere cuando un estudiante le pregunta a su maestro; “¿Maestro, si practico la meditación se me contestarán mis preguntas?” El maestro le contesta; “No, no te contestará ninguna de tus preguntas, pero va a eliminar al que está preguntando.” Ese es el miedo a dejar a un lado nuestra identidad.
Siguiendo la analogía del sueño, tu próxima pregunta que es, “En Este sueño tienen que despertar los 6.000.0000.000 de personas del mundo?”
No. El único que tiene que despertar eres Tú. Y ni siquiera eres tú, el
“tu” que se cree estar aquí haciendo la pregunta el que tiene que
despertar. Es la Mente que te está soñando a ti.
Por eso es que
cuando dormimos y soñamos decimos, “anoche ‘yo’ estuve hablando con mi
mama en un sueño.” Sí, ¿pero quien era el “yo” que estaba hablando con
su “mama” en el sueño? Pues no existía ni un “yo” ni una “mama” ya que
las dos imágenes eran productos de la mente que estaba soñando el sueño
en ese momento, y esto nos lleva a tu ultima preocupación sobre que si
tu madre no es real.
No es que tu madre no es real, pues es ahí
donde el ego todavía mantienes su identidad falsa haciéndonos creer que
nuestra madre, que nuestros hermanos, que nuestra familia, que nuestros
amigos, que nuestras experiencia, etc., son reales.
Lo que no es
real es el “yo” que se cree estar aquí, y por consiguiente nada es
real. Así que 6.000.0000.000 de personas no tienen que despertar del
sueño, es la Mente que está soñando todo esto la que tiene que
despertar.
Cuando esa mente despierta no solo desaparecen las
6.000.0000.000 de personas, sino que desapareces tú, desaparece todo el
sueño. Por eso es que el curso nos recuerda: . “¿CUÁNTOS MAESTROS DE DIOS SE NECESITAN PARA SALVAR AL MUNDO? 1. La respuesta a esta pregunta es ... uno solo.” M-12.1:1
Uno
solo porque solo hay uno. Es solo un soñador. Es solo una Mente. Y el
soñador, que en este caso no es el “tu” que se cree estar haciendo la
pregunta, de la misma manera que no es el “yo” que se cree estar
contestándola, es la Mente que sueña esta experiencia.
Así que
lo mejor es, en vez de llenarse la cabeza de preguntas y intentar buscar
contestaciones, descansar en esos instantes santos y permitir que la
paz y la visión permee la Mente para que dulcemente se nos valla poco a
poco despertando de este sueño. Todas esas preguntas que haces son solo
distracciones pues te hacen creer que hay un “tu” y que hay un “mundo.”
Yo
(el personaje que se cree llamar Nick Arandes), por ejemplo, en este
caso que soy parte, no te “ti” sino que de el mismo sueño en el que
aparenta haber un “tu” y “yo”, a través de este escrito me recuerdo a mi
mismo que retorne mi atención hacia la paz de Dios, hacia el "interior"
y confíe en que a raíz de este proceso de pretender estar compartiendo
estas palabras “contigo” la mente se va reconociendo a Si misma.
Pueda
que llegue un momento en el que no sienta la inclinación de compartir
preguntas ni comentarios, pues a final de cuentas, ¿con quien en
realidad estoy compartiendo? Pero confío en que este es el proceso a
través recuerdo y refuerzo lo que voy integrando.
Eso es lo
único que se puede hacer, tomar consciencia de lo que soy, no analizar
ni buscar contestaciones pues como nos dice el curso, “Las respuestas que el mundo ofrece no hacen sino suscitar otra pregunta, si bien dejan la primera sin contestar”.
T-27.IV.7:4 Y lo que hago a través de este escrito es jugar el papel de
que le estoy compartiendo un comentario a un “otro”, mientras que
simultáneamente reconozco que no hay un “otro” a quien le comparto nada,
y eso me apoya en MI proceso de despertar.
Mas simple todavía: “Haz
simplemente esto: permanece muy quedo y deja a un lado todos los
pensamientos acerca de lo que tú eres y de lo que Dios es; todos los
conceptos que hayas aprendido acerca del mundo; todas las imágenes que
tienes acerca de ti mismo. Vacía tu mente de todo lo que ella piensa que
es verdadero o falso, bueno o malo; de todo pensamiento que considere
digno, así como de todas las ideas de las que se siente avergonzada. No
conserves nada. No traigas contigo ni un solo pensamiento que el pasado
te haya enseñado, ni ninguna creencia que, sea cual sea su procedencia,
hayas aprendido con anterioridad. Olvídate de este mundo, olvídate de
este curso, y con las manos completamente vacías, ve a tu Dios.” W-pI.189.7:1-5
"Ve
a tu Dios", que es decir, retorna la atención a la Paz, al silencio, a
estar presente con este momento, y será lo que será, confiando en la
Vida Misma.
Ya despertarás cuando sea su momento,
mientras que toda experiencia "aquí", si eres consciente, la utlizas
para ver donde todavia hay obstaculoas a la paz de manera que puedan ser
sanados. Por eso se nos recuerda; “Tu tarea no es ir en busca del
amor, sino simplemente buscar y encontrar todas las barreras dentro de
ti que has levantado contra él.“ T-16.IV.6:1