Mi hijo esta hace tiempo ya en las drogas y con malísimas amistades y costumbres, viene de un accidente que casi lo mata, casi pierde la pierna, estuvo 4 meses postrado sin amigos, donde solo estábamos apoyándolo la familia que vivimos con el ,mas nadie. En lugar de servir la experiencia para mejorar todo empeoro a grande escala. Busque un centro de psicólogos de personas que trabajan con jóvenes en estas circunstancias, no quiere ir, y me desespera la idea de que se mate, o lo maten o lleven preso...y la lista es larga, comencé a asistir yo misma a la terapia como guía para padres con el objetivo conjunto de que se sienta atraído y logre llevarlo( ellos sostienen que así funciona y aunque demore según cada experiencia, es a través de la propia voluntad que se puede ayudar, o se su voluntad de ir) pero el tiempo transcurre ya pasan casi 2 meses y cada vez es peor.Estoy desesperada no se que hacer, siento una desesperación por ayudarlo y a la vez me siento morir por dentro con todas las posibilidades de consecuencias...o acaso hay alguna cosa buena que salga de estas actitudes y yo ya perdí la capacidad de ver algo bueno? Te agradezco si poder darle un poco de luz a mi mente que parece haber dejado de ver la salida. un abrazo grande!"
Comentario: Tu has leído muchas de mis notas, has escuchado muchos de mis vídeos, y ahora te voy a hacer una pregunta, y eres tú la que de corazón tienes que ser lo suficientemente honesta contigo misma para contestarla. ¿Cuantas veces durante el día te das el tiempo de estar en silencio? ¿Cuantas veces durante el día te das la oportunidad de practicar observar vigilantemente los pensamientos del Espíritu Santo y no todo lo que el ego esta haciendo para distraerte?
Dices, "y aunque se que las elijo y les doy el poder, no puedo parar." Te quejas de que no puedes parar mientras que al principio tu misma dices, "…pero ahora mismo estoy atravesando una situación en la cual deje todo, el curso...la facultad...mi atención sobre mi misma...y de pronto siento que nada sirve, que nada vale de lo que aprendí,"
Vamos a utilizar la siguiente analogía. Cuando hay una bacteria en el cuerpo, y el medico te receta un antibiótico, si decides tomarlo, tienes que tomar la dosis completa, pues si la dejas a mitad, la bacteria se hace inmune al antibiótico, y la condición empeora. Pues si estas en el medio de un campo de batalla, que es nada mas que el sistema de pensamientos del ego buscando la manera de mantener tu atención en el mundo de las formas, de defenderse, y el antibiótico es Un curso de Milagros, como las cosas no han "mejorado" y lo dejas a un lado, ¿como puedes entonces pretender que el curso (antibiótico) te sirva?
Las cosas van como van, y todo es una oportunidad para perdonar. Pero si lees el curso para "inspirarte", no subestimes el sistema de pensamientos del ego. Por algo el curso nos recuerda, "El ego atacará tus motivos tan pronto como éstos dejen de estar claramente de acuerdo con la percepción que él tiene de ti. En ese caso es cuando pasa súbitamente de la sospecha a la perversidad, ya que su incertidumbre habrá aumentado." T-9.VII.4:6-7
Y aunque el ego en sí no existe, pues el mismo curso nos recuerda, "El ego no es mas que que una parte de lo que tu crees acerca de ti." T-4.VI.1:6, tenemos que utilizar un lenguaje como si el ego tuviese una personalidad propia simplemente para que en tu mente no subestimes el apego que le tienes a él. Pues el ego no tiene efecto sobre ti a menos que tu decidas elegirlo, y eso es lo que sucede por defecto cuando tu no practicas diariamente esos estados de silencio, esa constante observación, y esperas que ahora el Espíritu Santo te pueda ayudar cuando estás en medio del sistema de pensamientos del ego en todo su apogeo.
Ahora, esta es la parte del curso en la que muchos estudiantes se traban. Quieren practicar el curso, pero no quieren dejar su identidad. No quieren soltar el "yo". Es por eso que estas tan atemorizada, porque estas identificándote con este "yo", este "personaje" y por lo tanto experimentas miedo. El miedo no proviene del Espíritu Santo pues el Espíritu Santo está consciente de lo que tu realmente eres. Sin embargo, sin las practica diarias de esos estados de silencio, especialmente cuando las cosas van "bien", cuando las cosas van mal, no vas a poder parar ese tren.
Por eso te pregunto, y lo hago de nuevo para que tu misma veas si de verdad estas dedicada a este trabajo, o si el curso es un libro inspirador al que vas una y otra vez para que te resuelva algo. ¿Cuantas veces durante el día tu te has dado el tiempo de estar en silencio? ¿Cuantas veces durante el día te das la oportunidad de practicar observar vigilantemente los pensamientos del Espíritu Santo y no todo lo que el ego esta haciendo para distraerte? Por algo el curso nos recuerda, "Observa cuanto vigilancia has estado dispuesto a ejercer para proteger a tu ego, y cuan poca para proteger a tu mente recta." T-4.III.10:3
La respuesta a tu pregunta es la misma, no hay nada que puedas hacer para cambiar las cosas, pero si tienes acceso a un Nuevo Maestro para que por lo menos puedas tener acceso a cambiar tu mentalidad, y es ahí donde experimentas paz, no a través de enviarme este mensaje contándome tus problemas, que a eso se refiere Cristo cuando te dice, "Observa cuanto vigilancia has estado dispuesto a ejercer para proteger a tu ego,…" T-4.III.10:3
¿Si quieres ganar peso que tienes que hacer? Comer mas. ¿Si quieres perder peso que tienes que hacer? Comer menos. ¿Si quieres experimentar mas paz que tienes que hacer? Practicar diariamente el silencio, la observación, la contemplación, el perdón. Habiendo dicho eso, ¿si quedes experimentar conflicto que tienes que hacer? Lo mismo que has estado haciendo hasta ahora? Esto no es una ciencia, pero si es una practica diaria. Por algo el curso nos recuerda, "Deseo la paz de Dios. Dsecir estas palabras no es nada. Pero decirlas de corazón lo es todo. Si pudieras decirlas de corazón, aunque sólo fuera por un instante, jamás volverías a sentir pesar alguno, en ningún lugar o momento." W-pI.185.1:1-3
Así que la "luz" que puedo llevar a tu experiencia, es que primero que nada recuerdes que, "Todas las cosas obran conjuntamente para el bien. En esto no hay excepciones, salvo a juicio del ego. " T-4.V.1:1-2 Por lo tanto, si te sigues quejando porque no estas haciendo tu practica diaria de la meditación, del perdón, pero no para resolver nada en tu "mundo" sino que para que el Espíritu Santo te ayude a recordar quien tu realmente eres, simplemente estas alimentando mas y mas tu ego. Y por lo tanto lo estas fortaleciendo. Por algo el curso nos recuerda, "Lo que tienes que reconocer es que cuando no compartes un sistema de pensamientos lo debilitas." T-6.V.B.1:4
Así que no trates de parar ese tren de pensamientos. Parándolos solo les das mas y mas realidad en tu mente. Simplemente, acepta todo tal y como es. Acepta tu miedo, acepta tus tren de pensamientos, acepta tu dolor, acepta la situación, acepta la experiencia, acéptalo todo, y es ahí donde tienes acceso a la paz. De ahí en adelante, confía en el Espíritu Santo dejando a un lado tus expectativas de como las cosas "deberían" ser, y es ahí como practicas elegir a un Nuevo Maestro en tu mente, o como el mismo curso nos dice, "Cambiar de mentalidad significa poner tu mente a disposición de la verdadera Autoridad." T-1.V.4:7 Y lo que tengas que hacer o decir, se te irá revelando en cada momento presente, en otras palabras, en cada instante santo.
La bendición de esta experiencia por la que estás atravesando es que de una vez y por todas, si empiezas ahora a elegir la paz de Dios, si empiezas la practica DIARIA del silencio, a medida que sanas tu mente podrás ver en retrospectiva la perfección de esta situación ya que tu mente está mas y mas identificada con la paz, con la tranquilidad, no porque tu mundo cambie, sino que porque lo estas empezando a percibir a través de los ojos de Cristo y no del ego.
Y entonces entenderás a lo que el curso se reviere cuando te dice, , “En Dios estás en tu hogar, soñando con el exilio, pero siendo perfectamente capaz de despertar a la realidad:” T-10.I.2:1