Todo
rechazo es en realidad un auto rechazo debido a que el rechazo ocurre
en la mente. Nadie tiene el poder de rechazarnos. Lo que nos hace sentir
rechazados son nuestros pensamientos de rechazo que ahora queremos
proyectárselos a alguna persona o circunstancia en el mundo. Es así como
se “justifica” el rechazo hacia uno mismo.
Vamos entonces a
mirar la causa del rechazo y las diferentes maneras que se experimenta.
Según el sistema de pensamientos del ego el rechazo tiene que ver con
alguna experiencia “pasada” y por consiguiente me la paso indagando a
ver que me ha sucedido para que se pueda entonces encontrar la “causa”
de ese rechazo y poder sanarla.
Ese tipo de acercamiento no
deshace el sistema de pensamientos del ego sino que mas bien lo refuerza
haciendo el “pasado” real en la mente, mas el rechazo continuará siendo
experimentado solo que tomará una forma diferente.
Sin embargo
hay otra manera de abordar ese mismo tema y es que el rechazo
simplemente proviene de la creencia inconsciente de que Dios me ha
rechazado, que es lo que el sistema de pensamientos del ego me hace
creer. ¿Como no me voy a sentir rechazado si me creo vivir en un cuerpo
separado de todos y de Dios?
Al no tomar consciencia de que Dios
nunca me rechazó sino que fui yo el que rechazó a Dios, suprimo esa
culpa inconsciente para poder justificar mi sentido de victimismo
(rechazo) y proyectársela a algo o alguien en el “mundo”.
Obviamente
la separación de Dios nunca ocurrió pero ese es el lenguaje que se
utiliza pues nuestra experiencia es la de separación. Continuando con el
tema en discusión, si quiero sanar el sentido de rechazo en mi, primero
tengo que tomar consciencia de que nada ni nadie me está rechazando
sino que mis pensamientos de rechazo son los que me hacen sentir de esa
manera.
Ahora puedo tomar responsabilidad de llevar el problema a
la única causa que no tiene nada que ver con lo que me haya sucedido en
el “pasado,” pues como muy bien me recuerda el Curso; “Toda curación
es una liberación del pasado. Por eso es por lo que el Espíritu Santo
es el único Sanador. Él enseña que el pasado no existe, …” T-13.VIII.1:1-3
“Cuando
mantienes que eres culpable, pero que la fuente de tu culpabilidad
reside en el pasado, no estás mirando en tu interior. El pasado no se
encuentra en ti.“ T-13.X.4:1-2
“¿Cómo ibas a poder cambiar
el pasado, salvo en fantasías? ¿Y quién te puede dar aquello de lo que
según tú se te privó en el pasado? El pasado no es nada.” T-16.VII.2:6-8
“…no tiene objeto dar una respuesta en función del pasado porque el pasado no importa,…” T-4.II.1:3
En
este momento presente, que es el momento donde se desvanece el pasado y
el futuro, puedo sentir la sensación que esté sintiendo sin etiquetarla
como rechazo y recordar que Dios me ama, que soy el santo y amado Hijo
de Dios y por consiguiente Su amor me rodea. Y descansar en ese espacio.
Al
identificarme más con el amor de Dios en mi (la paz de Dios en mi), lo
que sucede no es que alguna persona cambie su percepción de mi ni nada
así por el estilo, sino que dejo de buscar en el mundo lo que creo que
me falta, lo cual es el amor de Dios, y por lo tanto no puedo sentirme
rechazado.
Pero si no tomo consciencia de que soy el Santo Hijo
de Dios amado, no voy a poder sino que constantemente buscar el amor que
me falta en el mundo. Y los pensamientos de rechazo hacia mi mismo
continuarán debido a que si no consigo lo que creo que quiero me voy a
sentir rechazado. Si mi pareja no me quiere me siento rechazado. Si no
tengo suficiente dinero me siente rechazado. Si no alcanzo mis metas me
siento rechazado. Si mi familia no me apoya me siente rechazado. En fin,
si las cosas no van como yo deseo, o mis expectativas no se cumplen, o
no me ven como quiero que me vean, etc., en simples palabras no aprueban
de mi, me siento rechazado.
Y como el rechazo está en mi mente,
en ese creencia errada, una vez más me la paso por el mundo buscando la
manera de proyectar el rechazo inconsciente que siento de Dios hacia mi
para justificar esa sensación de victimismo. Y el mundo que es nada mas y
nada menos que “…la imagen externa de una condición interna”,
T-21.In.1:5 me brindará múltiples oportunidades, no para comprobar que
soy rechazado, sino que para poder yo JUSTIFICAR los pensamientos de
rechazo que se encuentra en mí y que temo soltar. Pues si los suelto eso
significaría que tendría que dejar a un lado mi identidad como víctima.
Por lo tanto cada vez que me sienta rechazado, no es por lo que
haya ocurrido en un pasado sino que porque no quiero dejar de sentirme
como víctima. Una persona adicta al sufrimiento conscientemente dice que
no quiere sufrir, no obstante inconscientemente deriva un placer de ese
sufrimiento y por lo tanto no lo quiere soltar.
Esto
no requiere castigo sino que corrección. Y esa corrección no se hace
empleando lógica sino que invitando a un Nuevo Maestro (Espíritu Santo).
Por algo se nos recuerda: “Tú no puedes ser tu propio guía hacia los milagros, pues fuiste tú el que hizo que fuesen necesarios.” T-14.XI.7:1
Y
el curso constantemente nos ha enseñando como hacerlo, solo que como no
queremos soltar nuestra identidad como seres separados (víctimas)
pasamos por alto “…la simple enseñanza de lo obvio.” T-31.IV.7:7
¿Como el curso aborda este tema en discusión?
“Cuando
de alguna manera tu paz se vea amenazada o perturbada, afirma lo
siguiente: No conozco el significado de nada, incluido esto. No sé, por
lo tanto, cómo responder a ello. No me valdré de lo que he aprendido en
el pasado para que me sirva de guía ahora." T-14.XI.6:6-9
Que sería lo mismo que decir; “Si
estás dispuesto a renunciar al papel de guardián de tu sistema de
pensamiento y ofrecérmelo a mí, yo lo corregiré con gran delicadeza y te
conduciré de regreso a Dios.“ T-4.I.4:7
Que sería lo mismo que decir; "Nada de lo que veo significa nada." W-pI.1
Que sería lo mismo que decir; "Lo
esencial, sin embargo, es que reconozcas que no sabes nada. El
conocimiento es poder y todo poder es de Dios. Tú que has tratado de
quedarte con el poder para ti sólo lo has "perdido". Todavía lo tienes,
pero has interpuesto tantos obstáculos entre él y tu conciencia de él
que no puedes utilizarlo. Todo lo que te has enseñado a ti mismo, ha
hecho que seas cada vez menos consciente de tu poder." T-14.XI.1:1-5
Y podría citar cientos de pasajes a través del curso que dicen lo mismo pues la corrección siempre es la misma.
"Es
fácil entender las razones por las que no le pides al Espíritu Santo
que resuelva todos tus problemas por ti. Para Él no es más difícil
resolver unos que otros. Todos los problemas son iguales para Él, puesto
que cada uno se resuelve de la misma manera y con el mismo enfoque." T-26.II.1:1-3
La
segunda manera de sentirme rechazado es cuando soy yo el que rechazo a
un hermano. Pues si todos somos parte de lo mismo, al rechazar a un
hermano me rechazo a mi mismo. Para no confundir la forma con el
contenido, recordemos que rechazar no tiene nada que ver con estar de
acuerdo.
En otras palabras, yo no tengo que estar
de acuerdo con el comportamiento de un hermano que está actuando bajo el
ego, pero si tengo que tomar consciencia de que aun cuando su
comportamiento esté basado en miedo, él, al igual que yo, es el Santo
Hijo de Dios inocente. Y de esa manera me uno a él en la mente no en el
cuerpo. Yo no tengo que compartir con una persona cuyo comportamiento es
hostil o simplemente no me apetezca, pero si alguna pensamiento de ira,
ataque, resentimiento, miedo (separación) de esa personal llega a mi
mente, si puedo, con la ayuda del Espíritu Santo, ver su inocencia y es
así como me uno a él en nombre del Amor.
Al no rechazar
su esencia, ya que no me dejo distraer por su comportamiento, no estoy
rechazando mi esencia, y esa es la segunda manera de no sentirme
rechazado.