Comentario: Primero te recomiendo que veas este video titulado “’La cura’, para la inseguridad en las relaciones” por Rupert Spira. El enlace de YouTube es: https://youtu.be/bxxbo6-aKfU
Recuerda que ninguna pareja en el mundo es tu complemento, ya tu estás completa porque éstas completa en Dios. Por consiguiente ya tú eres la fuente y con una pareja simplemente compartes lo que eres. Si de lo contrario te crees que tu pareja es tu complemento sufres por miedo de perder eso que te complementa.
En el mundo nada nos complementa , el mundo es simplemente lo que nos distrae de la Verdad, o lo que podemos utilizar para reinterpretar con el Espíritu Santo y por consiguiente extender nuestro amor a todo, no solo a una persona, aun cuando tu comportamiento con tu pareja en la forma tenga algunas diferencias que con otras personas obviamente. Pero no hay miedo, lo que hay es amor compartiendo, confianza, libertad.
Pregunta: “Wao es muy cierto, entonces que hago?”
Comentario: Yo no estoy para decirte qué hacer o qué no hacer. Esa es la pregunta que el ego siempre hace, yo simplemente te estoy recordando que tu atención siempre es en desarrollar en ti la paz que ya es parte de tu Ser. Desde esa paz lo que sea que termines haciendo en el mundo será un efecto y será la próxima oportunidad que tendrás tú para ver si has aprendido la lección o si todavía hay más oportunidades para perdonar.
Pregunta: “si pienso que es my complemento, entonces ¿debo dejar esa relación en paz o ver que aprendo de eso?”
Comentario: Puedes continuar conociendo a esa persona y disfrutar el proceso sólo que lo haces conscientemente. Ya sabes que esa pareja no es tu “complemento” sino que la oportunidad que tienes en frente para continuar ver obstáculos saliendo para ser sanados, para ser perdonados. Y ese en si es el propósito de toda relación. No solo relación de pareja, sino que con todo aquel con quien nos relacionamos; pareja, vecino, pariente, hijo, jefe, trabajador, taxista, mendigo, animales, hasta objetos “inanimados” como computadoras, coches, en fin, todo aquello que creemos es nuestra fuente de sufrimiento, frustración o miedo, es otra oportunidad que se nos brinda para sanar.