Pregunta: “Hola Nick, no se como escuchar la voz del Espíritu Santo. Por mas que lo intento me sale el ego por todas partes.”
Comentario:
Una de las trampas fundamentales que se comete es creer que el Espíritu
Santo nos va a contestar a través de una “voz” especifica. No podemos
descartar el hecho de que el Espíritu Santo utilizará el vehículo que
fuese necesario para que podamos entender Su mensaje, lo cual en algunas
ocaciones podría tomar la forma de una “voz.” Pero el sistema de
pensamientos del ego siempre hace historias sobre esa “voz”, se hace
expectativas.
Recordemos también que la función del Espíritu
Santo es deshacer en la mente la creencia de que hay un yo separado de
todo. Dado ese el caso si yo quisiese escuchar la voz de el Espíritu
Santo y Él me contestaste eso reforzaría la creencia en la mente de que
hay yo separado que existo. Y eso haría de las enseñanzas de un curso de
milagro una filosofía dualista.
Por consiguiente no soy yo (el
personaje) el que escucha la voz del Espíritu Santo. Es la Mente que
está soñando todo esto la que escucha la voz del Espíritu Santo para
recordarse a Sí Misma que no es un personaje separado. Por eso es que la
práctica del instante santo es tan importante debido a que nos brinda
un espacio para traer presencia y no dejarnos distraer por conceptos ni
especulaciones de la teoría de cualquier tipo de enseñanza.
Así
que escuchar la voz del Espíritu Santo no es necesariamente hacerle una
pregunta para que una “voz” la conteste es simplemente la práctica
diaria de no interpretar, de rendirnos completamente al momento presente
sin hacer historias de ninguna de nuestras experiencias.
A raíz
de eso, con una mente más aquietada se podría decir que estamos ya
identificados con el sistema de pensamientos del espíritu Santo. Eso
para mi es escuchar Su Voz.
Y lo que terminamos haciendo, las
decisiones que nos encontramos tomando en cada momento son los efectos
de esa identificación con el Espíritu Santo (Mente Recta, Paz Interna,
etc.). Así es como yo lo practico y como lo percibo.
No me hago
rollos con relación a si es el Espíritu Santo el que está hablando o no,
simplemente observo que cuando experimento conflicto esa no es razón
para sentirme culpable es simplemente la oportunidad que se presenta en
ese momento para poner en práctica el perdón.
Estoy consciente en
cada momento de que la presencia del Espíritu Santo está conmigo. Eso
es todo lo que necesito saber para tener acceso a la paz que mora en mí
(Su Voz). Ya de hay si el Espíritu Santo se quiere comunicar conmigo a
través de una “voz” estoy seguro que la escucharé y no tendré duda
alguna de que es Su Voz la que estoy escuchando.
Pero
me da igual si escucho una voz o no debido a que no hago nada especial
de ello. Si siento paz estoy seguro que estoy identificado con Su Voz.
¡Así de simple!
Cuando lees un Curso de Milagros por ejemplo, es
Su Voz la que estás leyendo. Sólo que se está comunicando a través de lo
que aparentan ser palabras escritas en papel. Y quizás tu quieres oír
una “voz” y por consiguiente te pierdes lo que Él intenta comunicar a
través de ese libro azul.
Según tu haces tu practica, no de
“escuchar” ninguna voz sino que de aquietar tu mente a través del
silencio, de la completa aceptación, que no significa ahora que no
tengas pensamientos sino que vives desde la aceptación total, la
pregunta no es si escuchas una “voz” sino que si confías plenamente en
cada momento presente. Si tu respuesta es “sí” estás abierta a la Guía
del Espírito Santo, estás literalmente escuchando Su Voz.
Y si
durante tu trayectoria necesitas escuchar una “voz” el Espíritu Santo la
utilizará. Pero si estás tú con expectativas de escuchar una voz, eso
es lo que no te permite escuchar Su Voz que habla contigo en todo
momento, en todas las formas habidas y por haber sin necesidad de emitir
algún sonido.
Ahora mismo el Espíritu Santo es parte de mi y
soy parte de Él, y eso es lo que necesito recordar. Escuchar una voz o
no me da igual. Simplemente confío en que este momento y cada momento
está desenvolviéndose perfectamente como tiene que ser, y si elijo la
paz de Dios en todo momento, confío en que lo que tenga que tener lugar
en cada momento será lo que tenga que tener lugar, como en este momento
es escribir esta nota, sin hacer nada especial de ello. ¿Luego? No se,
ya veremos según cada momento se va desenvolviendo.
Así que
tranquila, el Espíritu Santo, Cristo, Esencia, Dios o como quiera
llamarlo está siempre contigo en cada momento, así que no tienes que
preocuparte por escuchar una voz. Eso es lo único que tienes que
recordar para así no dejarte distraer por las ilusiones.
Voy a
resumir toda esta nota simplemente de esta manera, ¿quieres escuchar la
voz del Espíritu Santo? Entonces deja de juzgar. Ese silencio, esa
aceptación, ese dejar de interpretar, és Su Voz.
“El
perdón, en cambio, es tranquilo y sosegado, y no hace nada…Simplemente
observa, espera y no juzga…No hagas nada, pues, y deja que el perdón te
muestre lo que se deba hacer a través de Aquel que es tu Guía, tu
Salvador y Protector, Quien lleno de esperanza, está seguro de que
finalmente triunfarás.” W-pII.1.4:1…3…2:1