La pregunta original es la nota que titula: ¿Como Ver Las Cosas De Otra Manera, Y Por Que Parejas Minipulativas Entran En Mi Vida? y se puede leer en mi blog a través del siguiente enlace:
http://pucdm.blogspot.com/2015/09/como-ver-las-cosas-de-otra-manera-y-por.html
Pregunta: “Hola
otra vez: un detalle que olvidé de incluir en mi pregunta de ayer es
que para deshacer el conflicto que vivo, y no sabiendo como actuar, yo
rechazo a la otra persona, la ignoro, la empujo fuera de mi vida y me
cierro (por miedo). Esto me genera una gran culpa porque me siento muy
cruel y porque sé que él no me ha hecho absolutamente nada, que no tiene
ninguna culpa, al contrario, es una buena persona y hace simplemente lo
que puede y como puede. Gracias.”
Comentario:
Permíteme empezar por aqui aunque no vaya directamente a tu pregunta. La
culpa inconsciente es la que nos motiva a buscar en el mundo la fuente
de amor (sustento) de la cual creemos ser carentes de. Por encima de
ello el deseo de sentirse uno como víctima se proyecta en el tipo de
relaciones a las que uno se siente atraído. Es por eso que cuando la
gente se queja de que atrae ciertos tipos de personas no se dan cuanta
que son ellos los que están atraídos a ese tipo de personas. Es por eso
que el mundo es un espejo, y el espejo no manipula, el espejo refleja.
Refleja en contenido de nuestra menta inconsciente.
Vamos a mirar
esto desde un contenido no dual aunque es prácticamente imposible
porque estamos desde la experiencia dual, pero vamos a ver en que
dirección nos llevan estas palabras.
Si solo hay una mente de la
cual tu eres parte de, lo que estás observando es el contenido de tu
mente que ahora rechazas. Eres tú interactuando contigo misma. Pero el
“Tú” del que hablo no es esta “mujer” que me hace la pregunta sino que
la Mente que está soñando todo esto. Cuando la mente sueña es solo una
mente, aunque en el sueño se percibe como una parte de si misma separada
de todo lo que percibe.
Esa parte de si misma se le conoce como
el “yo”, que es lo que cree percibir, y lo que ese “yo” percibe “fuera”
se le conoce como el “mundo.” Por lo tanto, según la mente separada hay
un “yo” y un “mundo”. Por lo tanto, te sientes atraída a una parte de
tu mente por sentirte separada y necesitada, y ahora esa parte de tu
misma mente que "atraes" lo cual te enseña lo que no quieres ver en ti
lo rechazas, que es lo mismo que decir, te rechazas a ti misma. A eso se
le conoce como conflicto.
Volviendo a la experiencia física, esa
culpa inconsciente que primero te impulsa a “atraer” una pareja que
refleja el contenido carente de tu mente y que ahora rechazas no se
resuelve a raíz de una estrategia lógica sino que a raíz del perdón.
Pero el perdón, volviendo de nuevo al contenido no dual, es para tú
recordar lo que eres, no para que resuelvas tus problemas en la forma.
Al
tomar consciencia de que eres mente, por naturaleza la identificación
con el cuerpo se va debilitando, que por eso se nos recuerda: “Lo que tienes que reconocer es que cuando no compartes un sistema de pensamientos lo debilitas.” T-6.V.B.1:7 Y lo que empieza a llenar la mente es la paz de Dios.
Esa
paz se refleja ahora como el contenido de la mente que se percibe ahora
en el mundo de las formas. No se encuentra uno necesitado de nada ni de
nadie, sino que mas bien se encuentra extendiendo el amor y la paz que
es a todo (a si mismo). Esto aunque se pueda entender a nivel lógico se
tiene que experimentar. Y eso es lo que se experimenta cuando se deja de
proteger nuestro sistema de pensamientos.
Tienes razón cuando
dices que él es una buena persona ya que al igual que tú y “todos” somos
inherentemente inocentes. Pero para yo poder percibir y recordar esa
inocencia tengo que primero identificarme con la mentalidad de el
Espíritu Santo. Ese es el trabajo que se hace a diario cuando me doy
espacios de quietud (instantes santos) donde aunque me encuentre
distraído, ya sea por lo que estés sintiendo, por lo que esté pensando, o
por lo que esté percibiendo, retorno mi mente a este espacio para
comulgar con la paz que hay en mi y desaparecer en el amor que me arropa
en cada momento.
Cuando ese es mi enfoque y dejo de poner mi
atención en el mundo de las ilusiones poco a poco se va deshaciendo el
“yo” con el que me he identificado. Es como desaparecer en el amor que
soy. Sólo que como a ese Amor (Unidad) es a lo que le temo que sería lo
mismo que decir que le temo a Dios (a Mi Mismo), vuelvo a traer mi
atención al personaje que creo ser (separación) con todo su drama, sus
placeres y sus dolores. Y es ahí donde quiero invocar al Espíritu Santo
para que resuelva todos mis aparentes problemas qué no tienen nada que
ver con el único y verdadero problema el cual es que se me ha olvidado
lo que realmente Soy.
Esto me recuerda el extracto del curso que me dice: "Es
fácil entender las razones por las que no le pides al Espíritu Santo
que resuelva todos tus problemas por ti. Para Él no es más difícil
resolver unos que otros. Todos los problemas son iguales para Él, puesto
que cada uno se resuelve de la misma manera y con el mismo enfoque (el verdadero perdón). T-26.II.1:1-3
Por
lo tanto la culpa inconsciente que estás viendo salir no te pide que la
analices ni que la justifiques con las historias que la mente quiere
fabricar a raíz de lo que estés sintiendo. Sino que, “Cuando de
alguna manera tu paz se vea amenazada o perturbada (cuando me encuentro
interpretando, juzgando), afirma lo siguiente: No conozco el significado
de nada, incluido esto. No sé, por lo tanto, cómo responder a ello. No
me valdré de lo que he aprendido en el pasado para que me sirva de guía
ahora." T-14.XI.6:6-9
Estas no son palabras que se dicen de
la boca para fuera. Es en la dirección hacia donde nos llevan esas
palabra lo que importa. Y eso lo decide la intención detrás de las
palabras. Si la intención es sanar la mente de la creencia en la
separación las palabras nos llevan en dirección a que la mente se ponga
en una posición neutra, aún cuando los sentimientos están ahí de manera
que la Sabiduría interna, Mente Recta, Espíritu Santo o como quieras
llamarlo vaya deshaciendo culpa inconsciente.
Si la intención no
obstante es erradicar una incomodidad pero seguir identificados con el
“yo” que creo ser, las palabras se utilizarán mas bien como
“afirmaciones” con la esperanza de que nos brinden lo que deseamos.
Yo
por ejemplo cuando me encuentro sintiendo profundamente debido a
escenas que aunque se que no son la causa de mi sentir así lo parecen,
simplemente me detengo a observar el sentir, y observo las historias que
la mente intenta fabricar para justificar ese sentir de manera que
recuerde que no tienen nada que ver con lo que siento. Por lo tanto,
¿que trabajo haces a diario para tomar consciencia de que eres mente y
no cuerpo? Eso es lo importante.
Si te soy honesto, este proceso
para mí aunque no ha sido fácil, si te puedo decir que el estar
consciente de ello me ha apoyado muchísimo en mirar mas profundamente la
culpa inconsciente y permitir que se vaya poco a poco desintegrando el
miedo para así profundizar en el amor. Pero hay que mirar, y estar
consciente de la dirección en la que el curso nos lleva. Siento para mi
que eso es muy importante.
De lo contrario, el ego querrá hacer
el curso conmigo, no porque el ego en realidad exista, sino que porque
inconscientemente continúo eligiéndolo.
Hasta que
no tomes consciencia de ello, la culpa inconsciente continuará siendo
proyectada a las formas y eso es lo que te distrae del trabajo. No
obstante, ahora vamos a mirar esa culpa inconsciente y recordar que, “nunca estoy disgustado por la razón que creo.”
W-pI.5 Así vamos poco a poco retornando la atención al presente,
dejando a un lado las historias que la mente fabrica para distraernos de
la Verdad, haciéndonos creer que somos un cuerpo separado de todo,
separado de Dios (separado de uno mismo).