Pregunta: “Te quería preguntar si elegimos el momento en que abandonamos este mundo, igualmente si programamos de antemano todas las cosas que nos van a suceder, las personas con las que vamos a interactuar, etc. Te lo pregunto a raíz de que una ex-pareja mía falleció repentinamente y todavía no lo he asimilado.Me pregunto si él eligió ese momento para dejar este mundo o puede ser una consecuencia de la interferencia del ego. No puedo evitar sentirme culpable por no haber hecho algo por él para evitar su muerte. Gracias y un abrazo.”
Comentario: Aquí tú como personaje no eliges nada
ni programas nada. Simplemente observas el guión que se va desenvolviendo como
consecuencia de haber elegido en contra de la Verdad. No hay nada que podamos
hacer relacionado al currículo de cada ser humano, ni el nuestro. Lo que
podemos hacer, con la ayuda del Espíritu Santo, es no permitir dejarnos
distraer por el mundo de las apariencias.
En tu caso, una de tus inquietudes, el
problema no es que tu ex pareja falleció sino que más bien la culpa que sientes
que es sino el efecto de elegir el sistema de pensamientos de él ego en tu
mente para interpretar tu guión. El guión está escrito debido a que el Santo
Hijo de Dios está destinado a regresar al Padre y no a quedarse en un estado de
separación permanente.
Por lo tanto, demos gracias que el guión
esté escrito. Pues ésa es la garantía de que no permaneceremos sintiéndonos
separados por el resto de la eternidad. Por consiguiente la oportunidad que
tenemos en cada momento es de observar cuan identificado estamos con el sistema
de pensamientos del ego para así poder ejercer el libre albedrío que tenemos de
elegir a un Nuevo Maestro (Espíritu Santo).
Esto que estoy compartiendo puede muy bien
resumirse en el siguiente párrafo del manual para el maestro que nos recuerda:
“El mundo del tiempo es el mundo de lo ilusorio. Lo que ocurrió
hace mucho parece estar ocurriendo ahora. Las decisiones que se tomaron en
aquel entonces parecen como si aún estuviesen pendientes; como si aún hubiera
que tomarlas. Lo que hace mucho que se aprendió, se entendió y se dejó de lado,
se considera ahora un pensamiento nuevo, una idea reciente, un enfoque
diferente. Puesto que tu voluntad es libre, puedes aceptar lo que ha ocurrido
en cualquier momento que así lo decidas, y sólo entonces te darás cuenta de que
siempre había estado ahí. Tal como el curso subraya, no eres libre de elegir el
programa de estudios, ni siquiera la forma en que lo vas a aprender. Eres
libre, no obstante, de decidir cuándo quieres aprenderlo. Y al aceptarlo, ya lo
habrás aprendido.” M-2.3:1-8
Abordando otra de tus inquietudes, recuerda
que la interferencia del ego no es lo que determina si nos quedamos o no en
éste mundo. Al haber elegido el ego en la mente no obstante, eso fue lo que dio
lugar a la creencia de que existe un un “yo” y de que
existe un “mundo.”
Por eso los obstáculos a la Verdad son todo
lo que nuestro sentidos aparenten mostrarnos, todo lo que creemos, sea lo que
sea. Y no podemos escapar de esa encrucijada con nuestro sistema lógico de
pensamiento. Necesitamos un sistema de pensamiento que va mas allá de ésta
experiencia, que por algo se nos recuerda: “Una vez que alguien
queda atrapado en el mundo de la percepción, queda atrapado en un sueño. No
puede escapar sin ayuda, porque todo lo que sus sentidos le muestran de la fe
de la realidad del sueño.” (Prefacio UCDM)
Tus preguntas por consiguiente no te van a
llevar a una experiencia, pero tu práctica con el deseo genuino de sanar sí.
¿Estás poniendo en practica los ejercicios del curso? ¿Tienes el deseo de
recordar que eres el Santo Hijo de Dios, o todavía quieres seguir
identificándote con tu experiencia física? “Tal como el curso
subraya, no eres libre de elegir el programa de estudios (no eres libre
de elegir tu guión), ni siquiera la forma en que lo vas a
aprender. Eres libre, no obstante, de decidir cuándo quieres aprenderlo
(cuando quieres elegir el sistema de pensamientos del Espíritu Santo).”
M-2.3:6-7
No tienes que temer en soltar esta
identificación con el personaje ahora mismo, pero si tienes que tomar
consciencia de que lo único que es importante es la paz de Dios para que el
Espíritu Santo te lleve de la mano a que sueltes. Y eso sucederá muy
orgánicamente a raíz de que un cambio de mentalidad empieza a tener lugar en
ti.