¿El Amor de la Mente al que se Refiere y Por Eso el Espíritu Santo me Hace Centrarme en la Frente?

Pregunta: “Referente al punto de “extender el Amor en mi conciencia” en la entrevista de la radio dices que hay que extender desde el corazón a la conciencia. También entiendo que es el Amor de la Mente al que se refiere y por eso el Espíritu Santo me hace centrarme en la Frente, si lo interpreto bien.  Pues me encuentro con la situación que cada vez cuando me centro en la Mente he intento sentir el Amor solo allí aun así mi corazón se abre y ya tengo movida con 'el hermano'.

Siento que no es cuestión de dejar de sentir con el corazón, verdad?  Acaso no debo intentar sentir el Amor en la Mente, si no que eso sucederá solo con la ayuda del Espíritu Santo.? Extender el Amor desde el corazón a mi conciencia, como lo puedo hacer sin tener movida por parte del “hermano”?
 
Entiendo que en realidad Soy la Mente que sueña todo esto y “el hermano” es inocente, por ello sigo perdonando como lo escribes en tu libro. Agradecería muchísimo si me podrías ayudar con estas preguntas.”

Comentario: Cuando dices, “…en la entrevista de la radio dices que hay que extender desde el corazón a la conciencia.” Yo nunca he dicho eso, y si lo dije es entonces un juego de palabras que se saca fuera de contexto.

La razón es porque no hay corazón ni hay consciencia. Y quizás en lo que se dice con el lenguaje dual mundano es como decir que el amor es algo que no se interpreta. Pero vamos a continuar con tu pregunta.

Luego dices, “…entiendo que es el Amor de la Mente al que se refiere y por eso el Espíritu Santo me hace centrarme en la Frente,…” Bueno, no hay “frente” porque no hay un “yo” (cuerpo). No confundamos la Mente con letra mayúscula, que seria lo mismo que decir Dios, con el cerebro humano que no tiene nada que ver con la Mente.

Ni tampoco confundamos el “corazón” del cuerpo con simplemente utilizar la palabra corazón para hacer hincapié de no poner la atención en el intelecto.

Por eso es que el ego utiliza las palabras para distraernos de la Verdad. Esa es la razón por la cual el curso nos recuerda: “He tomado las máximas precauciones para usar palabras que sean casi imposible de distorsionar, pero siempre es posible tergiversar los símbolos si así se desea." T-3.I.3:11 De igual manera nos dice, “No olvidemos, no obstante, que las palabras no son más que símbolos de símbolos. Por lo tanto, están doblemente alejadas de la realidad.” M-21.1:9-10

Luego cuando dices, “…me encuentro con la situación que cada vez cuando me centro en la Mente he intento sentir el Amor solo allí aun así mi corazón se abre y ya tengo movida con “el hermano.” Hay una razón por la cual el curso nos recuerda, “Este curso no pretende enseñar el significado del amor, pues eso está más allá de lo que se puede enseñar. " T-In.1:6

Puedes tener conceptos y experiencias que según tu son experiencias de “amor.” Y puede que ese sea el caso, y si es así, lo sabrás. Y si lo que haces te apoya en unión con tu hermano, esta bien. Y si cuando hablas de centrarte en la Mente con letra mayúscula es descansar en el silencio de la paz, entonces se puede decir que estás centrada en el amor, en la paz de Dios.

Y de ese ser el caso, observarás que no hay miedo, no hay culpa en tu mente. ¿Ves como utilicé la palabra mente ahora como si fuese en tu mente personal? Es por eso que el lenguaje es limitado, pues en sí, de la misma manera que no hay palabras para describir Dios, no hay palabra para describir Amor. Y observa que hablo de Amor con letra mayúscula, pues si Dios y Amor son sinónimos, al estar hablando del Amor Verdadero, estamos hablando de Dios.

Luego preguntas, “Siento que no es cuestión de dejar de sentir con el corazón, verdad?” ¿Vez como tu misma estás abriendo una lata de gusanos con tus preguntas? Estás metiendo partes del cuerpo como si tuviesen relevancia. A menos que de nuevo cuando hablas de corazón lo dices de forma metafórica para describir amor. Por algo el curso nos recuerda; “Las respuestas que el mundo ofrece no hacen sino suscitar otra pregunta, si bien dejan la primera sin contestar”. T-27.IV.7:4

También dices, “Entiendo que en realidad Soy la Mente que sueña todo esto y “el hermano” es inocente,…” Sí, lo entiendes, pero no lo crees debido a que tu experiencia no es la de ser una Mente soñando esto, es la de ser un cuerpo preguntando. Por lo tanto, necesitas entrenar la mente a descansar más y más en el silencio para que puedas tener acceso al cambio de mentalidad del que estamos hablando. Y la razón por la que tu hermano es inocente es porque tu eres inocente. Y hasta que no te percibas tu como inocente vas a proyectar la culpa en tu hermano.

No obstante, ahora ya sabes que aunque creas que tu hermano es culpable, no tienes otra alternativa sino que perdonar ya que de la misma manera que todo ataque es un auto ataque, todo perdón es un auto perdón.

Voy a compartir una analogía primero, y luego con un párrafo del curso. “¿Maestro, si practico la meditación, eso me va a contestar mis preguntas?" Lo cual su maestro le responde, "no, no va a contestar ninguna de tus preguntas, pero eventualmente eliminará al que está preguntando."

Y finalmente:


"Haz simplemente esto: permanece muy quedo y deja a un lado todos los pensamientos acerca de lo que tú eres y de lo que Dios es; todos los conceptos que hayas aprendido acerca del mundo; todas las imágenes que tienes acerca de ti mismo. Vacía tu mente de todo lo que ella piensa que es verdadero o falso, bueno o malo; de todo pensamiento que considere digno, así como de todas las ideas de las que se siente avergonzada. No conserves nada. No traigas contigo ni un solo pensamiento que el pasado te haya enseñado, ni ninguna creencia que, sea cual sea su procedencia, hayas aprendido con anterioridad. Olvídate de este mundo, olvídate de este curso, y con las manos completamente vacías, ve a tu Dios." W-pI.189.7:1-5

¿Sabes por qué cada vez mas me doy cuenta lo simple que es Un curso de milagros? Porque mi enfoque es en observar mi mente lo fácil que puede entrar en conflicto y lo fácil que es para mi juzgarme por sentirme así, y lo simple que es descansar en ese espacio sin enjuiciarme y confiar en que el Espíritu Santo está haciendo Su trabajo.

Y si no es porque he experimentado los resultados de identificarme con el sistema de pensamientos del Espíritu Santo, no podría continuar haciendo este trabajo. Aunque el curso no sea facil dada la resistencia interna, no obstante, es muy simple.

"La razón de que este curso sea simple es que la verdad es simple. La complejidad forma parte del ámbito del ego y no es más que un intento por su parte de querer nublar lo que es obvio." T-15.IV.6:1-2 

Otra forma de decirlo sería: "Tú que piensas que este curso es demasiado difícil de aprender, déjame repetirte que para alcanzar una meta tienes que proceder en dirección a ella, no en dirección contraria. Y todo camino que vaya en dirección contraria te impedirá avanzar hacia la meta que te has propuesto alcanzar. Si esto fuese difícil de entender, entonces sería imposible aprender este curso. Mas sólo en ese caso. Pues, de lo contrario, este curso es la simple enseñanza de lo obvio." T-31.IV.7:3-7

Sigue practicando esos instantes santos de silencio, y permite que el Espíritu Santo haga Su trabajo a través de ti. Este proceso requiere paciencia y confianza. Pero recuerda, es un proceso. Es por eso que se le conoce como “curso” que seria sinónimo de camino, jornada, proceso.