Pregunta: “Buen
 día Señor Arandes. Mire yo tengo ya mas de un año que inicie con Un 
Curso De Milagros, leí el texto lo mas concienzudamente posible y en ése
 tiempo me dio muchísima hambre, comía hasta 3 veces mas de lo normal y 
ahora voy en el ejercicio 107 del libro de ejercicios. Y en ocasiones me
 siento muy mal, mi cuerpo todo cansado como si toda la noche hubiera 
estado haciendo ejercicio físico y en ocasiones unos ejercicios me 
provocan rechazo y hasta ganas de vomitar; mas sin embargo continuo con 
fe y entusiasmo. 
Mi pregunta es: todo esto que estoy 
experimentando es normal? Mi malestar físico es normal por estar leyendo
 éste libro? En ocasiones me despierto de noche é inconscientemente me 
veo haciendo los ejercicios. Por favor oriénteme Usted que ya hizo éste 
curso. Mis malestares continuarán durante todo el Curso de Milagros? Mil
 gracias por su atención y espero me pueda dar su opinión. Gracias.”
Comentario:
 Lo primero que tenemos que tener en consideración es que cuando 
empezamos un proceso de deshacimiento, los obstáculos a la paz salen a 
la superficie para ser observados y dejarlos ir. Lo que sea que se esté 
experimentando en el mundo de las formas son nada mas que obstáculos a 
la Verdad. 
El obstáculo mas presente es el creer 
ser un cuerpo. De ahí surgen los diferentes obstáculos que se perciben a
 través de sus sentidos, como lo que es el “mundo”, nuestros 
pensamientos, sensaciones, etc.
No obstante, nada de eso tiene 
que ver con la Verdad. La Verdad es que usted está descansando en Dios y
 todo esto es un sueño de separación.  “En Dios estás en tu hogar, soñando con el exilio, pero siendo perfectamente capaz de despertar a la realidad:” T-10.I.2:1
Ahora,
 para efectos de su pregunta, cuando uno empieza a practicar el Curso 
conscientemente, o como usted mismo dice, concienzudamente, puede que 
muchas experiencias como las que usted experimenta broten a la 
superficie ya que lo que se está observando o experimentando es la 
resistencia al Amor, a la Verdad (a soltar este sueño de separación).
No
 obstante, lo que no queremos hacer es cometer el error de juzgarnos, o 
de juzgar esas experiencias como “buenas” o “malas” sino que observarlas
 sin apego, pues nosotros no somos ni esas experiencias ni el “yo” que 
se cree estar experimentándolas. 
Quien o Qué 
realmente “somos”, y pongo somos entre comillas ya que no hay “muchos”, 
pero para efectos de lenguaje, Quien o Qué realmente somos o Soy es El 
que observa el “yo” que se cree estar aquí al igual que sus 
experiencias.
Y eso no seria tampoco una contestación correcta ya
 que no solo no hay un “yo” que está aquí, de la misma manera que no hay
 un “Quien” o “Que” que observa el “yo” que se cree estar aquí pues eso 
seria indicativo de que hubo una separación por o cual daría lugar a uno
 que observa y otro que es observado. 
Como puede ver, ya el lenguaje se queda corto. Por algo el mismo Curso nos recuerda; "Este curso te conducirá al conocimiento (Verdad), pero el conocimiento en sí está más allá del alcance de nuestro programa de estudios. Y no es necesario que tratemos de hablar de lo que por siempre ha de estar más allá de las palabras.” T-18.IX.11:1-2 
Por
 lo tanto, simplemente continúe haciendo las lecciones, practicando el 
Curso concienzudamente, y no se deje distraer por las diferentes maneras
 a través el cual la resistencia al Amor, la resistencia a la Verdad 
brotan a la superficie. 
Y recuerde que una vez que
 usted continúa eligiendo la paz de Dios que seria lo mismo que decir 
elegir el sistema de pensamientos del Espíritu Santo, toda decisión que 
el “yo” se encuentre tomando en el mundo será un efecto de esa decisión 
de elegir la paz de Dios.
Por lo tanto, si siente que necesita 
algún tipo de ayuda o apoyo, ya sea terapéutico, o medico si es una 
condición física, usted será dirigido a ello. Y quizás no. Yo he tenido 
muchas experiencias donde el cuerpo responde de una manera que 
simplemente lo que me sentí inclinado fue a no hacer nada, y la 
condición desaprecio por si misma, de la misma manera que en otras 
ocasiones me sentí inclinado a ir a un medico y esa fue la decisión 
perfecta para mi en ese momento.
Una vez mas, el hecho de que 
está haciendo el curso concienzudamente, y de que está haciendo las 
lecciones y aplicándolas, va por buen camino. No se deje distraer por lo
 que le esté sucediendo al “cuerpo” o a sus “circunstancias”. En cada 
momento hará lo que se tenga que hacer para lidiar con ellas. Recuerde, “No tengo que preocuparme por lo que debo decir ni por lo que debo hacer, pues Aquel que me envió me guiará." T-2.V.18:3
